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La edil díscola de Podemos denunciará a Pablo Iglesias y a la cúpula del partido

La concejal alicantina, expulsada de su formación por adjudicar contratos a dedo, se revuelve contra los suyos y acudirá a la justicia para defender su honor y dice sentirse acosada.

La todavía concejal, Nerea Belmonte, toma represalias contra sus compañeros.

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La concejal no adscrita en el Ayuntamiento de Alicante, Nerea Belmonte -que gracias al pacto tripartito ostentaba las responsabilidades de Acción Social de Guanyar-Podemos- ha anunciado que no renunciará a su acta y que seguirá ejerciendo como miembro de la corporación municipal alicantina. Belmonte, que accedió desde Podemos a la confluencia de izquierdas que forma parte del tripartito, fue expulsada por su propio grupo tras haber adjudicado contratos a compañeros de partido y el pasado sábado, tal y como publicó ESdiario, fue expulsada de su partido.

La todavía edil -el Gobierno municipal compuesto por PSOE, Compromís y Guanyar Podemos le ha dejado sin sueldo- ha anunciado que recurrirá ante los tribunales su expulsión y que denunciará a la Comisión de Garantías de Podemos-que tomó la decisión de echarla-, porque "se trata de una gestora provisional y no representativa, que ha asumido competencias que no le son propias" y que -según ha dicho- la juzgó, en realidad, por "desobediencia", sin aportar ninguna prueba de las supuestas irregularidades cometidas con los contratos. Ha añadido que esta gestora "no fue elegida por los militantes" sino "impuesta a dedo" por el secretario general de Podemos en la Comunidad Valenciana, Antonio Montiel, mano derecha de Pablo Iglesias en esta comunidad.

Pero la "amenaza" de denuncia va más allá y podría afectar ya directamente a Pablo Iglesias porque Belmonte ha denunciado públicamente la "caza de brujas" y el "acoso" -por parte, entre otros, de altos representantes de Podemos- que ha sufrido en las redes sociales y ha avanzado que emprenderá además acciones legales contra todo aquel que le haya acusado de tránsfuga, entre ellos Iglesias y otros dirigentes nacionales del partido.

Y es que la dirigente morada díscola ha manifestado que "tránsfuga es quien se cambia de un partido a otro", mientras que ella asegura que es concejal independiente. "No soy ninguna cabeza de turco ni ejemplo de corrupción como se está queriendo hacer ver", ha añadido.

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