Rajoy da por inaugurada una nueva etapa de alegrías en el PP tras los años duros
"Esto ha empezado a cambiar", proclamó ante su Junta Directiva Nacional mencionando las encuestas y estudios. El Congreso del partido será los días 10, 11 y 12 de febrero en Madrid.
Rajoy recibe el aplauso de la Junta Directiva Nacional del PP.
Borrón y cuenta nueva. Mariano Rajoy dio por inaugurada este lunes una nueva etapa en el Partido Popular, una de recuperación después de cuatro años y medios de pérdida de votos. "Esto ha empezado a cambiar", proclamó, y para ello se refirió a las últimas encuestas y estudios sociológicos, lo que es más importante, al crecimiento cosechado entre las elecciones de diciembre y las de junio (7,2 millones de votos y 7,9, respectivamente). Sin olvidar la mayoría absoluta de Alberto Núñez Feijóo en Galicia.
El presidente del Gobierno y líder de los populares reunió a su Junta Directiva Nacional para fijar la fecha del Congreso de la reelección de Rajoy: éste se celebrará los días 10, 11 y 12 de febrero en Madrid, y Luisa Fernanda Rudi presidirá el comité organizador. La intención es que después los congresos regionales tengan lugar antes de la Semana Santa y entre ésta y el verano, los provinciales.
El ambiente en Génova 13 fue de lo más distendido, con Rajoy dando las gracias a todos los dirigentes y militantes por haber estado "más que a la altura de las circunstancias" teniendo en cuenta que "nada ha sido fácil". "Somos un gran partido, yo no conozco un partido como éste en ningún lugar", proclamó entre aplausos de los suyos.
Según el jefe de filas de los populares, el PP ha sabido dar la vuelta a una situación que se arrastraba desde las elecciones generales de 2011 y, ahora sí, por fin va a volver a crecer en votos. "La gente es capaz de premiar si ve que se han producido rectificaciones", añadió, y a renglón seguido reconoció: "Nos hemos equivocado algunas veces".
A Rajoy se le notó con ganas de recuperar el tiempo perdido de tantos meses con un Gobierno en funciones y habló de sus dos grandes prioridades para esta legislatura: consolidar la recuperación económica, y dentro de ella llegar a los 20 millones de empleados en 2020; y articular varios pactos de Estado con la oposición.
Eso sí, el presidente advirtió de que deberán dejarle gobernar (si no siempre tendrá en su mano la opción de convocar elecciones a partir del próximo 3 de mayo): "Nadie puede impedir el ejercicio razonable de la acción de gobierno". Y también señaló en alusión al PSOE y Ciudadanos: "No liquidemos por puros prejuicios económicos las reformas que se han aprobado la pasada legislatura".