La carta de un alcalde del PP indignado amarga las uvas a Puig y Oltra

El alcalde Pedralba, un pequeño municipio de Valencia, se está convirtiendo en uno de los políticos de la oposición más incómodos para el Gobierno valenciano.

El mes pasado logró sacar los colores a la vicepresidenta, Mónica Oltra, en su conferencia en el hotel Ritz de Madrid, como contó entonces ESdiario. Ahora ha recurrido a una carta pública dirigida al presidente Ximo Puig para denunciar que, diez meses después, el Consell sigue sin cumplir el compromiso formal que adquirió de desviar la carretera por el centro de la población, a pesar de que se están produciendo diversos incidentes que podrían tener lamentables consecuencias para los vecinos.

Roberto Serigó, agricultor de profesión, consiguió que públicamente Oltra le diera la razón en su reivindicación. Sin embargo, el regidor está comprobando cómo las puertas de la Administración se le cierran. Su petición de entrevista sigue sin atenderse y mientras tanto los problemas en la travesía se suceden. El último episodio ocurrió en plenas fiestas de Navidad, cuando un camión golpeó un balcón y cayeron a la vía cascotes y el cable de la luz.

La paralización de la obra aprobada por el Gobierno del Puig en febrero ha puesto de relieve diferencias entre los miembros del Ejecutivo denominado de "mestizaje". La Diputación de Valencia, actualmente presidida por el PSOE, decidió el trazado y acordó los fondos para llevar a cabo la variante. La Consejería de Medio Ambiente (Compromís), tras aprobarla, la paralizó al afectar una pequeña parte del parque natural. Ahora Medio Ambiente emplaza a la Diputación a solucionar el conflicto y la institución provincial no mueve ficha. Entre tanto, han pasado diez meses...

El alcalde, en la carta pública, saca los colores a Puig y también al secretario autonómico de Medio Ambiente y Cambio Climático, Julià Álvaro, quien en la última entrevista con Serigó y otros responsables locales de otros municipios afectados por la carretera le advirtió de que sería la última vez que se dirigiría a él en castellano. Serigó recuerda en la misiva a Álvaro que el Estatuto de Autonomía reconoce la cooficialidad del castellano y del valenciano.

En la misiva, el alcalde le recuerda al presidente Puig: "El 26 de febrero el Consell, nuestro gobierno, el que usted preside, aprobaba la urgente ocupación de los bienes para acometer el inicio de la variante sur. Una urgente ocupación, sin esperar a que se acordara el precio de la expropiación de terrenos, por 'motivos de seguridad viaria' y para reducir cuanto antes 'los problemas de seguridad acústica y atmosférica' que padecen los vecinos de Pedralba, según quedó reflejado en el acuerdo del Consell dado a conocer por la vicepresidenta Mónica Oltra y trasladado al DOGV aunque con cierta demora".

Han pasado ya diez meses y todo no sigue igual; ¡está peor! presidente. La Conselleria de Medio Ambiente decidió paralizar la obra que había aprobado el Consell por 'urgencia' (...). Han pasado casi un año y, todo han sido buenas palabras, pero ningún avance. ¿Acaso hay que esperar a que ocurra un desastre para agilizar la obra? Presidente, usted ha sido alcalde como yo muchos años, y sabe que la seguridad de los vecinos es nuestra prioridad".

Falta de coordinación

El Consell admitió en su momento que una falta de coordinación llevó a aprobar y hacer pública, por parte de la vicepresidenta Mónica Oltra, la urgente ocupación y expropiación forzosa de los terrenos del proyecto que pretende sacar el tráfico pesado del centro de Pedralba. Eso ocurría el 26 de febrero y a ese Consell acudió Elena Cebrián, consejera de Medio Ambiente.

El acuerdo del Consell, sin embargo, no vio la luz en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana, hasta 20 días después. El retraso se debió a que la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural deseaba publicar la orden para modificar el Plan de Ordenación de Recursos Naturales del Turia. De esta forma la decisión política de paralizar el proceso tenía también una supuesta cobertura 'técnica'. Los socialistas en la Diputación no han querido tensionar la relación con su socio y han paralizado entregar las actas de ocupación de los terrenos.