La Guardia Civil abre una espeluznante línea de investigación sobre Diana Quer
Los agentes judiciales no descartan que la desaparición de la joven se deba a una venganza relacionada con el entorno familiar e investiga una preocupante maniobra de despiste con su móvil.
Han pasado más de cuatro meses desde la desaparición de la joven madrileña, aquella madrugada del 22 de agosto en Galicia, Diana Quer. La familia ha atravesado desde entonces un auténtico calvario. Las primeras navidades sin Diana y, lo que es peor, hoy en día hay pocas esperanzas depositadas en una pronta resolución del caso.
Ta y como les ha venido contando ESdiario -muchas de esas informaciones en primicia y en exclusiva- pese a los grandísimos esfuerzos y el trabajo de los agentes de la UCO y de los agentes judiciales de la Guardia Civil, lo cierto es que la investigación está en un punto muerto. Las numerosas pistas iniciales, algunas de ellas bastante solventes, se han ido diluyendo y transcurridos estos meses “no hay sospechosos principales”, tal y como han indicado a ESdiario fuentes solventes de la investigación.
Tras descartar, como les adelantábamos en este diario en rigurosa exclusiva, hallar algo trascendente en la línea de investigación abierta con los repetidores de telefonía y los móviles, la Guardia Civil centra ahora sus pesquisas en investigar si la desaparición de Diana podría estar relacionada con algún tipo de venganza contra el entorno familiar de la joven. En este punto, siempre según las mismas fuentes, los principales esfuerzos están centrados en “peinar” todos los negocios y operaciones empresariales de Juan Carlos Quer.
Esta información disgusta al padre de la joven desaparecida que ha llegado incluso, indican las fuentes consultadas, a expresar su malestar a los investigadores por esta circunstancia que entiende “perjudica” a sus negocios e incluso a su propia imagen.
Pero los investigadores de la UCO no descansan y dentro del amplio abanico de posibilidades que manejan sobre el caso comienzan a dar mayor credibilidad a una preocupante posibilidad: los agentes están cada vez más convencidos de que la desaparición de Diana Quer no se puede achacar a un suceso relacionado con la delincuencia común y casual y apuntan a delincuentes profesionales y altamente cualificados.
El "falso" trayecto de Diana Quer
A la falta total de imágenes del suceso, por la ruta utilizada que evitaba todas y cada una de las numerosas cámaras del dispositivo de control de tráfico, se une una inquietante sospecha de los agentes de la UCO: los investigadores no descartan que Diana Quer no hiciera el recorrido que traza su móvil sino que éste fuera transportado en un coche por un cómplice, y colaborador de los secuestradores, para así despistar a la Guardia Civil. De esta forma, otro coche habría escapado en otra dirección indeterminada a bordo del cual sí estaría la joven desaparecida, mientras otro seguiría la ruta que sí han marcado las antenas de telefonía.
Los agentes judiciales trabajan ahora en esa dirección, sin descartar ni mucho menos otras opciones, pero reconocen que se ha perdido un “tiempo de oro” siguiendo la posible falsa ruta de Diana Quer, hasta este momento algo que parecía como la única pista solvente de la investigación.
De ser cierto estas sospechas de los investigadores, el caso daría un vuelco y habría que partir de cero “peinando”, por ejemplo, todas las cámaras de tráfico de la zona, obviando ya el itinerario que hasta ahora se creía cierto y que había "dictado" el iPhone de Diana.