Mas trata de coaccionar al juez y hace de su declaración un acto independentista
Como en la última ocasión en la que fue citado a declarar, el expresidente de la Generalitat ha convertido su llegada al Juzgado en un nuevo acto soberanista. Y avalado por Puigdemont.
Una declaración de dirigentes políticos ante el juez reconvertida, de nuevo, en una marcha soberanista. Una demostración de fuerza tal vez concebida para presionar a los magistrados que juzgan la puesta en marcha de la consulta ilegal en Cataluña.
De esta forma, el expresidente de la Generalitat Artur Mas y las exconselleras Joana Ortega e Irene Rigau entraron este lunes en el TJSC a las 9.26 horas de este lunes arropados por el Govern, otros cargos electos y miles de catalanes.
El juicio estaba previsto para las 9 horas en la sala de vistas del TSJC, donde se sentarán los tres acusados frente a los tres magistrados que les juzgarán, de modo que el baño de masas que se pegaron los dirigentes independentistas por las calles de Barcelona obligó al juez a comenzar el juicio casi media hora más tarde.
De hecho, salieron de la Generalitat a las 8.20 arropados por un centenar de cargos electos, como Joan Tardà, Anna Simó (ERC), Marta Pascal, Jordi Turull (PDeCAT), Lluís Rabell, Joan Josep Nuet (SíQueEsPot), David Fernàndez, Lluc Salellas (CUP) y los eurodiputados Josep Maria Terricabras y Jordi Solé (ERC).
El recorrido empezó por la calle Jaume I y Argenteria y tuvo su punto álgido a su paso por el Fossar de les Moreres, monumento que es símbolo del independentismo catalán. Allí toda la comitiva se paró para cantar el himno de Cataluña, acompañados por varios centenares de ciudadanos.
Incluso, la plataforma Omnium Cultural ha organizado un mitin en defensa de la "república catalana".
Mas, Ortega y Rigau se enfrentan a una posible inhabilitación de hasta diez años para ejercer cargos públicos por presuntamente articular una estrategia "de desafío completo y efectivo" a la suspensión de la consulta por parte del TC, según la Fiscalía.
Ya comenzado el juicio, y como se había anunciado, la defensa de Mas ha pedido que en la vista oral comparezcan en calidad de testigos el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el ministro de Justicia, Rafael Catalá.
Mas se ha negado a contestar las preguntas de la Fiscalía y de la acusación popular. Al preguntarle el ponente del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) qué preguntas accede a contestar, Mas ha dicho que no responderá "ninguna" de la Fiscalía ni de la acusación popular, sino de su defensa y de las defensas de las exconsejeras Joana Ortega e Irene Rigau.
El expresident sí ha contestado a las preguntas de su abogado, Xavier Melero, ante las que ha afirmado que la "iniciativa a política" de organizar la consulta sobre la independencia del 9N fue de él.