La primera transfuga de Podemos: una senadora, expulsada, se pasa al Grupo Mixto
Elvira García es la primera parlamentaria nacional que se apunta a la "vieja" moda del transfugismo. Purgada por no pagar su alquiler social, se aferra al escaño y se rebela contra Espinar.
Primero fue en Baleares, con la expulsión de la mismísima presidenta del Parlamento, Xelo Huertas, y ahora es en el Senado. A Podemos se le comienzan a contagiar algunos virus de la "vieja política" y ya tiene su primera tránsfuga en la Cámara Alta.
Se trata de su senadora por Alava, Elvira García, que ha decidido desertar al Grupo Mixto mientras Podemos ultima su expulsión de la formación morada. Según revela este viernes la SER, Garcia ha anunciado su "rebelión" a través de un comunicado.
Elvira García estaba envuelta en una fuerte polémica después de que a principios de febrero se conociera que había dejado de pagar desde el año 2015 el piso de alquiler social del Gobierno vasco en el que vivía junto a sus hijos, pese a percibir su nómina como senadora. Podemos Vitoria le exigió entonces que renunciara a sus cargos por su "actitud poco ejemplar".
Según la citada emisora, esta misma semana, García ha resuelto la deuda de 5.000 euros que había acumulado con el Gobierno vasco y entregó las llaves renunciando al piso, lo que le ha permitido evitar el desahucio que estaba previsto para el próximo 6 de marzo.
"Nada sé de los cargos que se me oponen, ni de ningún expediente abierto contra mí ni de mi oportunidad de defenderme y dar explicaciones", afirma García en su comunicado, en el que denuncia una supuesta caza de brujas desde el propio partido morado.
"El cerco personal y el desamparo del que estoy siendo víctima –y que incluye a mi familia—habla de una situación que nada tiene que ver conmigo ni con la ciudadanía a la que tengo el honor de representar ni con el programa que debo defender en mi calidad de senadora."
Por su parte, el secretario de Organización de Podemos Euskadi, Lander Martínez ha asegurado que la senadora también adeuda al partido una cantidad aún por determinar de dinero.
Los códigos internos de Podemos establecen que los senadores, al igual que otros cargos públicos de la formación, pueden cobrar un máximo de tres veces el salario mínimo. El excedente de esa suma deben aportarlo al partido, que destina la mitad de ese dinero a gastos de funcionamiento y la otra mitad, a fines sociales.
Martínez ha asegurado que Elvira García adeuda a Podemos parte de esas aportaciones, aunque no ha podido determinar la suma del dinero pendiente de entregar al partido. Según ha explicado, Podemos reclamó hace dos meses a la senadora que hiciera frente a esos pagos.