Irene Montero trama una emboscada contra Soraya por el CNI y el Rey Juan Carlos
Podemos prepara una "trampa" en el debut parlamentario de su portavoz ante la vicepresidenta del Gobierno. Y ha elegido para su pregunta una delicada cuestión "más que sensible".
Es uno de los cara a cara más esperados tras la defenestración de Iñigo Errejón. Y este próximo miércoles, por fin, se va a producir. Será ese día cuando la nueva portavoz de Podemos, Irene Montero, debute en la sesión de control al Gobierno en el Congreso frente a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.
Y el partido de Pablo Iglesias busca un evidente ruido mediático con el tema elegido para el primer rifirrafe entre Montero y Sáenz de Santamaría: nada más y nada menos que las polémicas grabaciones del antiguo CESID al Rey Juan Carlos y sus supuestos amoríos secretos que están ahora saliendo a la luz.
Desde que asumió a mediados de febrero su papel de portavoz del grupo parlamentario de Unidos Podemos, Irene Montero no había dirigido ninguna pregunta a la vicepresidenta del Gobierno, con quien sí llegó a debatir su antecesor en varias ocasiones.
Podemos ha escogido para esta primera pregunta dirigida a la número dos del Gobierno la respuesta que el CNI dio a unas informaciones publicadas por el diario El Mundo sobre unas notas policiales de la cloaca de Interior incorporadas al caso Pujol en las que se acusaba a los servicios de Inteligencia de interceder a favor del expresidente catalán a cambio de que éste no desvelara supuesta información sensible sobre el Rey emérito Juan Carlos.
"¿Cuando el CNI recibe un órdago siempre responde diciendo 'quiero'"?, es la pregunta registrada este jueves por Montero, haciendo alusión a la contestación que dio el organismo que dirige el general Félix Sanz Roldán en enero al citado diario como reacción a las informaciones sobre las notas policiales, dando a entender, en lenguaje propio de una partida de mus, que no tiene nada que esconder.
Curiosamente ahora, casi dos meses después, la portavoz de Podemos ha decidido retomar este asunto para su primer encuentro con la vicepresidenta en una sesión de control en la Cámara Baja, en un previsible intento de volver a llevar al Congreso su denuncia contra la llamada "trama": la red de relaciones de poder que según el partido morado existe entre las élites empresariales, políticas y judiciales y que se han marcado como objetivo desmantelar.
De todas formas, el control parlamentario de las actividades del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) lo tiene asignado legalmente la Comisión de Gastos Reservados, de la que forman parte los siete diputados elegidos por el Pleno del Congreso, uno por cada grupo parlamentario, que tienen acceso a información clasificada como secreta.
Irene Montero es la representante de Unidos Podemos en ese selecto club, donde periódicamente deben comparecer los ministros que tienen asignados gastos reservados y también el director del CNI.