Zasca histórico de la diplomacia española al Reino Unido por Gibraltar
España ha sabido jugar muy bien sus cartas esta vez ante sus socios de la Unión Europea, como así lo reconocen en privado los diplomáticos británicos, noqueados tras el golpe.
Las palabras del antiguo líder del Partido Conservador británico, espoleando a Theresa May para que declare la guerra a España por Gibraltar como lo hizo Margaret Thatcher con las Malvinas hace 35 años han provocado un terremoto a uno y otro lado.
"Estoy absolutamente seguro de que nuestra primera ministra actual exhibirá el mismo aplomo a la hora de defender a nuestra gente en Gibraltar", señaló Michael Howard. "Creo que alguien en el Reino Unido está perdiendo los nervios y no hay ninguna base para ello", le respondió este lunes el ministro de Asuntos Exteriores español, Alfonso Dastis.
La prepotencia de Howard contrasta con lo que realmente piensa la diplomacia británica, donde se ha instalado la sensación de que España ha jugado mucho mejor sus cartas que Gran Bretaña. Y ya ha ganado una partida importantísima.
Ello a tenor de la respuesta que la UE hizo llegar el viernes a May tras la carta que la primera ministra británica envió a Bruselas el miércoles para iniciar la salida del Bloque. Carta en la que no mencionaba a Gibraltar (un error para la oposición).
En esa respuesta la UE dejaba claro que ningún acuerdo entre los Veintisiete y el Reino Unido, una vez que el país abandone el club comunitario, podrá aplicarse en Gibraltar sin un acuerdo previo entre el Reino Unido y España. Es decir, España tiene derecho a veto. Todo un jaque a May de la diplomacia española y del grupo parlamentario popular que encabeza Esteban González Pons.
De hecho The Guardian cita altas fuentes de la diplomacia en un artículo en el que pronostica que la Unión Europea "no dará marcha atrás" en esto último a la hora de negociar la parte del Brexit que atañe a Gibraltar.
Y a renglón seguido las mismas fuentes alaban en el rotativo británico el "tiempo y el esfuerzo" que España ha dedicado en la UE a dar esta batalla; hasta asegurarse uno por uno el respaldo de todos los socios.
De hecho, el primer ministro de Gibraltar, Fabián Picardo, está de los nervios, como lo demuestran sus declaraciones a Reuters: "No vamos a ser víctima del Brexit, al igual que no vamos a ser los culpables del Brexit: nosotros votamos a favor de permanecer en la Unión Europea, por lo que pagarlo con nosotros es permitir a España comportarse como un matón".
Picardo también se ha revuelto contra el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, por haber concedido a España derecho a veto cuando Reino Unido cierre el acuerdo con la Unión Europea para la salida del bloque. "El señor Tusk, que se ha dado a usar las analogías del divorcio y la petición de divorcio, se está comportando como un marido cornudo que se está llevando a los niños".