Interior descubre una mentira de ETA que avergüenza a PSE, Podemos, IU y PNV
Las autoridades policiales y el Ministerio consideran que la banda terrorista guarda 100 pistolas y dos lanzamisiles. El desarme no ha sido completo y el engaño hace temer lo peor. A
Lo cuenta el diario El Mundo este a falta de que las autoridades francesas terminen el inventario de los ocho zulos entregados el pasado fin de semana por los autodenominados artesanos de la paz a los verificadores, desde Interior ya se tiene claro que el desarme "no ha sido completo" y que es más que probable que las armas entregadas no sirvan para esclarecer los 312 asesinatos pendientes. Porque los especialistas tenían muy claro, antes de que se produjeran los actos del fin de semana, cuál era la cantidad de armas y explosivos que la organización terrorista mantenía ocultos en zulos en la frontera, pese a haber anunciado el final de su actividad violenta.
Porque, comparando el listado de material que ETA ha facilitado a los verificadorescon el que mantienen estos agentes de la lucha antiterrorista, según sus cuentas, la organización terrorista podría mantener aún varios zulos que no ha entregado y en cuyo interior, entre otro material, podría ocultar entre una y dos toneladas de explosivos. Además, estos especialistas echarían de menos en esta operación de desarme al menos otras 80 o 90 pistolas, la gran mayoría procedentes del robo perpetrado por los etarras en la fábrica de armas de la localidad francesa de Vauvert.
En esta comparación de inventarios, los encargados de acabar con ETA también entienden que los terroristas no han entregado, al menos, dos lanzamisiles que estarían en su poder desde principios de los años 90.
Aseguran que es imposible determinar el número de detonadores que pueden permanecer ocultos ya que su fabricación es artesanal y es difícil cuantificarlos. Como aclaran estas fuentes, en el listado facilitado a los verificadores, ETA desglosó la entrega de 120 armas largas y cortas y 2.700 kilos de material para la fabricación de explosivos.
Las fuentes consultadas por este periódico entienden que de los ocho zulos que ETA asegura que ha desbaratado, alguno de ellos no es propiamente un zulo sino que localizaron material que, probablemente, antes estaría escondido en alguna zona que ETA trata de blindar, ya que no es muy factible que algunos de sus escondrijos estuviera rodeado de chalés. No descartan que algunas armas estuvieran guardadas en viviendas del sur de Francia.
También inciden en que durante unas horas se anunció la entrega de hasta una docena de zulos con las armas, y finalmente, por la vía de los verificadoresúnicamente se han entregado ocho.
La convicción policial es que ETA cuenta con varios zulos en la zona fronteriza francesa. No descartan que, efectivamente, los que se presume que están al frente de la banda desconozcan su ubicación ya que pueden proceder, incluso, de finales de los años 80. Pero estos especialistas también sospechan que los encargados de ETA de organizar los eventos del fin de semana hayan dejado abandonados algunos de los zulos ante la sospecha de que estaban ya bajo control de las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado.
También inciden en que, al igual que el material explosivo entregado, es más que probable que todo el que aún permanece escondido esté ya inutilizado, caducado.
Como recuerdan desde Interior, las fuerzas de seguridad han intervenido al menos 120 arsenales de ETA en el cuarto de siglo transcurrido desde el desmantelamiento en 1992 en Bidart (Francia) de la entonces dirección de la banda, en los que había acumulado más de 12 toneladas de explosivos y sustancias para fabricarlos y cerca de 1.800 armas.