El caso de los urbanos amantes se recrudece: "Tus hijas se ahogarán en vómito"

Los detalles de la muerte del agente urbano Pedro Rodríguez, encontrado calcinado en el maletero de su propio coche, siguen superando con creces la ficción. Detenidos otros dos agentes por su asesinato, la que fuera su novia Rosa Peral, y el amante de ésta, Albert López, los dos han comenzado a culparse mutuamente de la terrible muerte de Rodríguez.

Barajado entre otros el móvil pasional, los dos agentes detenidos (exnovios y actualmente amantes) han declarado versiones contradictorias en las que se inculpan entre ellos.

Así, mientras Rosa asegura que Albert llegó a su domicilio y le obligó a subir a la parte de arriba: "Me pidió que subiera a las niñas mientras él en la parte de abajo se deshacía de Pedro. Me dijo que o le ayudaba o mis hijas morirían ahogadas en su propio vómito", declaró tal como informa La Vanguardia. Según su versión, tuvo que ayudarle a llevar el cuerpo en el maletero hasta el pantano de Foix.

Nada que ver con la versión de López: recibió una llamada de Peral desde su domicilio pidiéndole auxilio. Le dijo que acababa de terminar con la vida de Pedro y que le ayudase a deshacerse de él. Manifiesta también que mantenían una relación mientras ella lo niega.

De esta manera ambos intentan quitarse de encima la acusación directa de homicidio.

Lo que sigue siendo una incógnita es el móvil. Una de las hipótesis pasa por que la víctima se enteró de que Peral le engañaba con López, y los hechos se precipitaron.

Dado el historial polémico de los dos agentes, también se baraja la posibilidad de que el fallecido hubiera averiguado información sensible en contra de ellos. Cabe recordar que sobre el caso sobrevuela también la muerte de un mantero en 2014 en Montjuïc, en una actuación de los dos detenidos, que eran pareja en la Unitat de Suport Diürn.