Bronca en el Reino Unido por el boicot a Felipe VI que traman varios diputados
Los Reyes inician este miércoles una visita de Estado muy deseada por ambas partes que sin embargo se ha visto empañado en las últimas horas por el conflicto sobre Gibraltar.
En el Reino Unido todo está preparado para recibir con los brazos abiertos a los Reyes de España, que este miércoles inician una visita de Estado pospuesta por dos veces, invitados por la Reina Isabel II.
Sin embargo, un nubarrón se cierne sobre la presencia de Felipe VI en Londres a cuenta de Gibraltar. El diario The Sun revela que un grupo de diputados conservadores liderados por Andrew Rosindell planea un acto de protesta contra el Rey consistente en levantarse y abandonar sus escaños si a éste se le ocurre mencionar la soberanía del Peñón. Ya no digamos reclamarla.
El miércoles por la tarde Don Felipe intervendrá ante el Parlamento británica en una sesión conjunta de las cámaras de los Comunes y de los Lores. En Gran Bretaña se ha corrido la voz de que el Monarca hará alguna mención en su discurso a Gibraltar, teoría en buena medida alentada (no se sabe con qué intenciones) por el embajador británico en España, Simon Manley.
Así que un grupo de diputados del partido de la primera ministra, Theresa May, se ha puesto la venda antes de la herida y promete represalias si eso ocurre. Así se lo ha anunciado el cabecilla, el diputado Rosindell, a The Sun, recordando desde sus páginas a España que la soberanía de Gibraltar es un asunto "innegociable".
Al parecer la amenaza de boicot a la solemne intervención de Felipe VI genera preocupación en el Palacio de Buckingham y en Downing Street, porque podría derivar en un conflicto diplomático, según especula la prensa británica. Y amargar la cena que justo después la Reina Isabel II ofrecerá en Buckingham en honor de Don Felipe y Doña Letizia, con unos 150 invitados.
Por ahora solo los gabinetes del Rey y de Mariano Rajoy conocen el contenido del misterioso discurso, que ha despertado gran expectación en el país vecino.
Hace 31 años su padre, el Rey Juan Carlos, sí se refirió a Gibraltar en un discurso en el Parlamento británico, el primero que pronunciaba allí un monarca extranjero. Lo calificó como "lo único" que separaba a ambas naciones. Tres décadas después sigue siéndolo.