Machado es una cortina de humo: el alcalde de Sabadell esconde su imputación
Qué bien le ha venido a Maties Serracant, de Crida per Sabadell y regidor desde hace sólo tres semanas, la polémica del callejero para tapar la suya propia. Pero aquí la contamos al detalle.
Casualidades hay pocas en política. Y ésta tampoco lo parece. La polémica por el informe elaborado por el historiador Josep Abad, que entre otras cosas sugiere eliminar a Antonio Machado del callejero de Sabadell por españolista, ha proporcionado al alcalde de la localidad una cortina de humo perfecta para que no se hable de lo suyo.
¿Y qué es lo suyo? Nada menos que una imputación judicial por un presunto delito de tráfico de influencias que ya le llevó a declarar ante el juez en junio del año pasado, cuando aún era segundo teniente de alcalde. El motivo: la cesión de un local municipal a una entidad sociocultural.
Maties Serracant, perteneciente a Crida per Sabadell (a su vez integrada por la CUP y Entesa per Sabadell), asumió el bastón de mando del municipio barcelonés hace sólo tres semanas, el 26 de julio, en virtud del acuerdo suscrito en 2015 con ERC para turnarse en la Alcaldía.
Desde entonces su nombramiento a pesar de su imputación judicial ha sido objeto de una agria polémica. Tanto que casi ha monopolizado la vida política, con el PP, el PSC y Ciudadanos protestando a los cuatro vientos por una incoherencia más de los adalides de la nueva política: quienes dicen venir a limpiarla eligen por dedazo a un alcalde con una causa abierta en el juzgado.
En ésas estaban en Sabadell hasta que casualmente ha saltado a la palestra el caso Machado, que ha permitido a Maties Secarrant desviar la atención y poner un punto y aparte en la controversia que le perseguía desde hacía tres semanas.
Cumplida la misión, a otra cosa: el propio alcalde se ha encargado de anunciar en Twitter que la plaza de Antonio Machado no se toca: