Iglesias da la puñalada a Sánchez y se erige en mediador de Rajoy y Puigdemont

Después de alinear a Podemos con el independentismo catalán, y sumarse a las críticas de los radicales a los policías y guardias civiles que trataron de impedir el 1-O, Pablo Iglesias se erigió este miércoles en mediador entre Mariano Rajoy y Carles Puigdemont. El líder del partido morado reveló que ha telefoneado al presidente del Gobierno y al de la Generalitat para pedirles que se sienten a negociar ya entre ambos la búsqueda de un mediador o de un equipo de mediadores para solucionar la crisis en Cataluña. Todo, en lo que parece un nuevo movimiento para recuperar el foco mediático y recobrar el protagonismo a costa del líder del PSOE, Pedro Sánchez.

Así lo anunció en la rueda de prensa que ofreció en el Congreso tras participar en la llamada Mesa de partidos por la libertad, la fraternidad y la convivencia convocada por Podemos y sus socios de En Comú, IU y En Marea para buscar soluciones al "conflicto catalán", en la que han participado también PDeCAT, ERC, PNV, Compromís y, como observadores, representantes de CC.OO y UGT y de fuerzas europeas de izquierdas, de las que salió esta propuesta.

Esta iniciativa llega después de que, tras los incidentes del 1 de octubre, Podemos descartase a Rajoy y a su Gobierno como interlocutores válidos en el conflicto catalán, al considerar que su estrategia de "represión y violencia" les había "inhabilitado" para llegar a cualquier tipo de acuerdo. De hecho, el partido morado ha defendido en numerosas ocasiones que la solución pasa por "echar a Rajoy de La Moncloa" con una nueva moción de censura.

No obstante, en el encuentro de este miércoles en el Congreso, los asistentes acordaron proponer a ambos gobiernos que acepten buscar un mediador, propuesta que, según Iglesias, ni Rajoy ni Puigdemont han rechazado de entrada. "Queremos pedirles a los dos que se pongan de acuerdo en una mediación, que se sienten en una mesa para discutir en principio exclusivamente de una persona o un equipo de personas que puedan mediar para iniciar un diálogo político que por desgracia esta roto", explicó Iglesias.

Pero el líder de Podemos obtuvo respuesta inmediata de Rajoy, que le explicó que no puede dialogar con Puigdemont mientras mantenga su "chantaje tan brutal" al Estado, ya que, a su entender, lo que tiene que hacer el presidente de la Generalitat es renunciar a una declaración unilateral de independencia, según detallaron fuentes del Ejecutivo.

Rajoy escuchó la propuesta de Iglesias y le agradeció la llamada, pero le explicó que lo que tiene que hacer Puigdemont es renunciar a la declaración unilateral de independencia, algo que, según fuentes de Moncloa, "no es negociable". Así, fuentes del Ejecutivo recalcan que no se puede tratar con quienes plantean "un chantaje tan brutal al Estado", descartando por lo tanto un diálogo con el presidente de la Generalitat mientras no vuelva a la legalidad y mantenga el desafío secesionista.

En la reunión también participó el líder de IU, Alberto Garzón, que este miércoles se descolgó con un duro ataque al Rey, por su histórico discurso de la noche del martes. "No ha estado a la altura del momento político", escribió en un artículo en el diario Público, en el que lamentó el "tono antipático y hostil" empleado por el monarca ante "una grave crisis de Estado".

"Conozco personalmente al jefe de Estado. He conversado con él en varias ocasiones y sé que piensa las cosas antes de hablar. Hoy, sin embargo, me temo que le han asesorado sus enemigos", dijo Garzón.

La Iglesia aparece en escena

A este intento de favorecer la mediación entre Rajoy y Puigdemont parece haberse sumado en las últimas horas la cúpula de la Conferencia Episcopal. Así, Rajoy se reunió este martes por la tarde en el Palacio de la Moncloa con los cardenales y arzobispos de Barcelona y Madrid, Juan José Omella y Carlos Osoro, respectivamente, según reveló Europa Press de fuentes conocedoras del encuentro. La cita, sin embargo, no ha sido confirmado oficialmente ni por fuentes del Ejecutivo ni por las de los respectivos arzobispados.

Asimismo, según informó TV3, el vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, se reunió este miércoles con el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella. La reunión se produjo por la mañana, y además hay contactos desde hace semanas entre el Govern y Omella, y entre la Generalitat y el abad de Montserrat, Josep Maria Soler.

La Conferencia Episcopal Tarraconense, que reúne a los obispos de Cataluña publicó un comunicado el 20 de septiembre en que llamó a las diferentes administraciones públicas la gestión del bien común y la convivencia social, y añadió: "La Iglesia quiere ser fermento de justicia, fraternidad y comunión, y se ofrece para ayudar en este servicio en bien de nuestro pueblo".