No se fía: el TSJ catalán da la puntilla a los Mossos y los retira de su sede
El mayor Trapero no solo ha dañado el prestigio de sus antidisturbios y del papel del cuerpo como Policía Judicial. Las instituciones tampoco se fían de la lealtad de la policía autonómica.
El cuerpo de los Mossos D'Esquadra comienza a comprobar el daño causado a su prestigio por la actitud de sus mandos, en especial del mayor Josep Lluis Trapero, en la recta final del órdago independentista. Mientras varios jugados investigan la actuación de los agentes catalanes y muchos de ellos meditan abandonar la Policía autonómica, las principales instituciones del Estado en Cataluña adoptan medidas para evitar que su seguridad quede solamente en manos de los Mossos.
Así, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ordenó este lunes que la Policía Nacional se encargue a partir de ahora de dirigir la seguridad del edificio de su sede, en coordinación con los Mossos d'Esquadra, ante una eventual declaración de independencia.
Según informó el organismo judicial en un comunicado, así se lo ha ordenado este lunes el presidente del tribunal, Jesús María Barrientos, al jefe superior del Cuerpo Nacional de Policía, Sebastián Trapote, con lo que, de esta forma, los mossos dejarán de encargarse en exclusiva de la vigilancia del Palau de Justicia de Barcelona, donde se ubica el tribunal.
La decisión obedece "a la previsión de extremar la seguridad del edificio y garantizar su pleno y normal funcionamiento" ante la posibilidad de que el Parlament declare este martes la independencia y aplique la Ley de Transitoriedad, según la cual se suprimiría el TSJC y la figura de su presidente.
Barrientos ordena en concreto que la Policía Nacional despliegue dentro del Palau de Justicia, así como en su entorno y perímetro si fuera necesario, los efectivos imprescindibles para que, en colaboración con Mossos, "preserven la seguridad del edificio, el normal funcionamiento del Tribunal Superior de Justicia y el ordinario cumplimiento de sus deberes judiciales".
En el mandato al jefe de la Policía Nacional en Cataluña, Barrientos recuerda que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha hecho pública su determinación de aplicar esta ley pese a haber sido suspendida por el Tribunal Constitucional.
"Estas posiciones anunciadas vienen a perturbar invariablemente la integridad de este Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y la independencia de todos los magistrados que lo integran, incluido su presidente, en la medida en que lleva a su disposición", incide Barrientos, que cree que la coordinación de ambos cuerpos policiales puede preservar de manera más eficaz la legalidad constitucional.
Barrientos ya ha comunicado al responsable de la unidad policial de los Mossos ubicada en el interior del Palau de Justicia "para su inexcusable cumplimiento, así como de sus mandos operativos", y también se lo ha hecho saber al Consejo General del Poder Judicial y a la magistrada que investiga la causa contra Puigdemont y el resto de consejeros por la convocatoria del referéndum del 1 de octubre.