Lo tenemos: el whatsapp incendiario que envió directos a la cárcel a los Jordis
La juez Lamela se refiere en su auto a un mensaje que Òmnium envió a los suyos la tarde del 20 de septiembre y que demuestra hasta qué punto ellos y la ANC orquestaron la algarada callejera.
El auto con el que la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela fundamenta el ingreso en prisión provisional sin fianza de los presidentes de ANC y Òmnium Cultural desmonta cualquier intento de convertir a ambos Jordis en presos políticos.
Lo que ocurre es que al independentismo, que tiene previsto empapelar Cataluña con carteles como éste pidiendo la libertad de los dos principales agitadores del procés, le dan igual los hechos.
Pero los hechos son contundentes. La magistrada considera que hay pruebas más que suficientes para determinar que Jordi Sànchez y Jordi Cuixart fueron los convocantes y cabecillas del asedio sufrido por la Guardia Civil en diversos edificios públicos los días 20 y 21 de septiembre.
Y de hecho en su escrito se refiere a un mensaje de whatsapp que no incorpora pero que ESdiario reproduce aquí. Éste es la mejor prueba de cómo ambos Jordis organizaron una algarada para entorpecer el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
@matthewbennett.
"A través de las citadas convocatorias se hacía un llamamiento no a una concentración o manifestación pacíficas, sino para la "protección" de sus gobernantes e instituciones mediante movilizaciones ciudadanas masivas frente a los lugares donde se estaban llevando a cabo actuaciones policiales", señala Lamela en el auto.
Y prosigue: "En algunas de ellas se expresaba incluso que las concentraciones que existían era "para aturar la Guardia Civil" (para parar a la Guardia Civil), como expresa, por ejemplo, el mensaje de whatsapp de Òmnium de fecha 20/09/2017, enviado sobre las 8.50 horas". Mensaje que después fue reenviado a otros chats independentistas.
Lo que sí incorpora en el auto son varias fotografías de los Jordis subidos, megáfono en mano, a un vehículo de la Guardia Civil totalmente destrozado. Por más que sus abogados hayan recurrido la prisión preventiva, lo tienen muy difícil.