El rapapolvo letal de Rajoy a Tardá deja rotos a los diputados independentistas

La inminente aplicación del artículo 155 de la Constitución para atajar definitivamente la deriva independentista ilegal acaparó la sesión de control al Gobierno, este miércoles en el Congreso. Y aunque también los portavoces de PSOE y Ciudadanos, Margarita Robles y Albert Rivera, se interesaron por la crisis catalana, el duelo más destacado lo protagonizaron el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el diputado de ERC, Joan Tardá.

Con su habitual retorica incendiaria, Tardá aseguró que "nosotros habíamos pedido diálogo y su respuesta ha sido el 155". Y acusó a Rajoy de tratar de "castrar el Parlament" y de "dinamitar el modelo educativo catalán y TV3".

"No tiene ningún derecho a hacer sufrir a los catalanes. ¿Qué crimen hemos cometido?", se preguntó. Y, como hizo este martes su compañero Gabriel Rufián, lanzó una advertencia con sonido de amenaza. "Si usted persiste en la represión -avanzó-, la misma gente que salió a defender las urnas saldrá a la calle a defender cívica y pacíficamente al gobierno legítimo de Cataluña".

Pero, en su réplica, Rajoy fue directo al grano y pulverizó a Tardá, enmudeciendo a los diputados independentistas del PDeCAT y ERC. El presidente aclaró de entrada que la aplicación del 155 es "la única salida posible" ante el "desprecio a la legalidad vigente, al Estatuto y a la Constitución" por parte de Puigdemont.

"El objetivo es restaurar la legalidad, apostar por la convivencia y atajar las consecuencias económicas que sus decisiones están provocando", enfatizó Rajoy. Y, remachó, "lo único que ha querido negociar el señor Puigdemont conmigo es de los términos y los plazos de la independencia". Y recordó la negativa del presidente a acudir a la Conferencia de Presidentes, al Congreso y a la mesa que negocia la nueva financiación autonómica.