Los alcaldes del "procés" viajan 1.300 kilómetros en avión privado para montarla
Puigdemont y los cuatro exconsejeros prófugos reaparecen en un acto convertido en un ataque sin precedentes al Gobierno, al PSOE y Ciudadanos. Tras otro portazo de la UE.
Con un sonoro portazo. De esta forma recibieron las instituciones europeas a los 200 alcaldes independentistas que pretendieron este martes dar otra vuelta de tuerca a su intento de internacionalizar el procés. No fue solo que ninguno de los representantes del Parlamento Europeo, de la Comisión o del Consejo les recibiera. Ni siquiera pudieron acceder a ninguna sede comunitaria, ni con la mediación de los eurodiputados de ERC y PDeCAT.
Así que, finalmente, fue el salón de actos del Palacio de Bellas Artes (BOZAR) de Bruselas el que acogió el mitin de precampaña de la Associació de Municipis per la Independència (AMI) y de la Associació Catalana de Municipis (ACM).
El acto, retransmitido en directo durante más de dos horas por TV3, contó con la presencia del fugado Puigdemont y sus cuatro exconsejeros prófugos, y en él intervinieron además los eurodiputados Josep María Terricabras y Jordi Solé (ERC) y Ramón Tremosa (PDeCAT). Quién ha sufragado y con cargo a qué partidas este viaje del municipalismo independentista sigue sin ser aclarado.
Y nada más comenzar el acto se convirtió en un aquelarre contra la democracia española, la Constitución y los jueces. También contra el Gobierno y los partidos que han apoyado la aplicación del artículo 155. Se oyeron expresiones como "golpe de Estado", "fascismo", "maltrato" e, incluso, se desafió a los líderes europeos. "Señor Juncker, señor Tusk, señora Merkel, señor Macron: cuando los opositores políticos son encarcelados ya no hay democracia y esto es lo que está pasando en España. Cuanto más miréis hacia otro lado, más estáis colaborando a este abuso autoritario", llegó a decir la exconsejera fugada Clara Ponsatí.
Nuestros compañeros encarcelados han sido maltratados, llegó a decir Puigdemont. Eso sí, sin prueba alguna.
Pero fue Puigdemont, aclamado por los alcaldes al grito de "¡president, president!" el que más elevó el tono contra España. "Este golpe de estado de España contra un Parlamento, contra un gobierno legítimo, esta vulneración de los derechos humanos, con detenciones y con maltratos. Porque es necesario decirlo: nuestros compañeros encarcelados han sido maltratados", dijo.
"El fascismo español, ayudado por el nazismo, fusiló y ejecutó a Lluís Companys. Es un fascismo que hoy, en 2017, de manera totalmente impune, participa en manifestaciones convocadas por el partido que gobierna España en estos momentos", añadió.
TV3 retransmitió en directo más de dos horas de ataques, insultos y mentiras sobre España. Y de desafiantes mensajes a los líderes europeos.
Y terminó con una insólita amenaza a los líderes de la UE. "Señor Juncker, señor Tajani, ¿es esta la Europa que queréis? ¿Es esta la Europa que nos invitáis a construir? ¿Aceptareis o no los resultados de los catalanes? Porque si la gente respalda la decisión del Parlament, ¿qué haréis? ¿Continuareis ayudando al señor Rajoy en este golpe de Estado?".
Antes del acto, los dos centenares de alcaldes independentistas se concentraron ante las sedes de la Comisión Europea y del Consejo de la UE para reclamar "libertad para los presos políticos", en el marco de la visita, durante la que no fueron recibidos por ningún representante de las instituciones europeas.
"Como Europa no escucha y mira hacia otro lado, hemos venido a decírselo directamente para ver si de esta forma toman conciencia de lo que está pasando en Cataluña", explicó a la prensa Neus Lloveras, presidenta de la Associació de Municipis per la Independència (AMI), organizadora del viaje junto a la Associació Catalana de Municipis (ACM), que preside el alcalde de Premiá de Mar, Miquel Buch.
Los alcaldes independentistas, junto al eurodiputado del PDeCAT, Ramón Tremosa, con gabardina.
A pesar de que su objetivo destacado es "internacionalizar" la crisis política en Cataluña, según habían indicado Lloveras y Buch, ninguno de los miembros de la delegación de ediles fue recibido por representantes de las instituciones europeas.
Buch restó importancia a este hecho al explicar que ha sido un viaje organizado en apenas "48 horas hábiles" y negó que hubieran solicitado una sala del Parlamento Europeo para celebrar un acto durante la tarde, pese a que haya trascendido que el eurodiputado de PDeCAT Ramon Tremosa tuvo que cancelar la reserva de dicha sala este mismo lunes.
De hecho, los únicos apoyos visibles que recibieron los ediles fueron el de la eurodiputada del PNV, Izaskun Bilbao, y de dos eurodiputados de Bildu y la Liga Norte. Y del partido flamenco. Los compañeros de viaje del independentismo en Europa.