Un comisario de la UE se harta y pide a los independentistas que dejen de llorar
El vicepresidente primero de la Comisión Europea, Frans Timmermans, tomó la palabra después de escuchar la perorata de uno de los diputados belgas que han acogido a Puigdemont y los huidos.
Frans Timmermans durante su discurso en defensa de España.
La Unión Europea ha propinado al independentismo un nuevo rapapolvo -el enésimo-, esta vez por boca del vicepresidente primero de la Comisión Europea (CE), Frans Timmermans.
Ocurrió el miércoles por la tarde, durante un pleno del Comité de las Regiones. Había tomado la palabra el eurodiputado, del partido nacionalista flamenco N-VA, principal apoyo de Carles Puigdemont y los exconsellers huidos en Bruselas.
Ello para criticar la "inacción" de las instituciones europeas y pedir a Timmermans que condenara "los presos políticos en todas sus formas" y exigiera a España su "puesta en libertad".
El eurodiputado belga Karl Vanlouwe durante el pleno.
El aludido pidió intervenir y puso en su sitio a Vanlouwe, a Carles Puigdemont y a todo el secesionismo por creerse que pueden incumplir las leyes sin que les ocurra nada, y después llorar porque no se han respetado sus derechos.
"En el caso de España, la Comisión Europea no tiene ninguna crítica sobre el Estado de derecho, su sistema democrático y la aplicación de derechos humanos", señaló Timmermans.
El también comisario de la Mejora de la Legislación, Relaciones Interestitucionales, Estado de Derecho y Carta de los Derechos Fundamentales añadió que "si uno viola una ley democrática en un Estado de derecho debe enfrentarse a las consecuencias dictadas por jueces independientes".
"En España hay independencia de la judicatura, separación de poderes y no se están violando derechos fundamentales, por lo que cualquier cambio se debe conseguir mediante la ley", remachó.
"Esto es lo que opina la Comisión Europea y lo que opinan todos los gobiernos de los Estados miembros", zanjó.