Irene Montero y Podemos plantan un acto feminista porque lo organiza el PP
Las mujeres de la formación morada no han querido compartir reivindicación con las populares, y menos participar en una jornada impulsada por la presidenta del Congreso, Ana Pastor.
La presidenta del Congreso, Ana Pastor, observa seria el gesto de la portavoz de Podemos, Irene Montero.
Podemos va a volver a demostrar este jueves que su estrategia para este año preelectoral no pasa por el trabajo parlamentario e institucional, sino por volver a sus esencias y agitar las calles, como fórmula para recuperar los apoyos perdidos por Pablo Iglesias, según certifican todas las encuestas.
Y lo va a escenificar con un sonado plantón, y su correspondiente feo, a la presidenta del Congreso, Ana Pastor. Lo curioso es que los diputados liderados por el líder morado y por Irene Montero, van a dar la espalda a la Cámara con la que ha sido una de sus grandes banderas políticas en las últimas semanas: el papel de la mujer y el combate contra la brecha salarial.
Ya en el último Pleno, tras la sesión de control al Gobierno, diputadas y trabajadoras de Podemos protagonizaron un acto reivindicativo marca de la casa: un posado con camisetas en el hemiciclo. Eso que Montero conocía ya los planes de Pastor de celebrar el 8-M en el Parlamento con toda solemnidad y boato. Empeño personal suyo y compartido por el resto de los portavoces, para dar a esta cita una mayor relevancia que en ocasiones anteriores.
Sin embargo, Podemos ve en la iniciativa de Pastor todo lo contrario. "Las instituciones públicas y especialmente ésta, que es la casa de la gente y de la soberanía popular, no debería programar agendas paralelas a la del movimiento feminista", se ha lamentado este martes.
Para ello, la presidenta del Congreso va a reunir a una representación de mujeres en la élite de sus respectivas profesiones y a diputadas de todos los grupos parlamentarias. Salvo Podemos, que ha decido dar plantón a la cita y volcarse en las manifestaciones en la calle.
El acto, que será presidido por la propia presidenta del Congreso, consta de un coloquio en el que van a participa la vicepresidenta del Tribunal Constitucional, Encarna Roca; Eva Calvo, atleta que consiguió la medalla de plata en taekwondo en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro; la directora de la Real Academia de la Historia y miembro de la Real Academia Española, Carmen Iglesias; y la directora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), María Blasco. Mujeres que son una referencia nacional e internacional.
Mujeres referentes en sus profesiones van a relatar sus experiencias en el Congreso. Pero Podemos no quiere escucharlas.
También intervendrán en el coloquio Ana Coto Montes, profesora titular del Departamento de Morfología y Biología Celular de la Universidad de Oviedo; Sara Giménez, Abogada y Responsable del Área de Igualdad de la Fundación Secretariado Gitano; Rita Míguez, presidenta de la Asociación Nacional de Mujeres de la Pesca; Albina Pedraza, Premio Mujer Rural y Elvira Roca Barea, filóloga y escritora.
Y en representación de todas las fuerzas políticas han confirmado su asistencia Marta González (PP), Susana Sumelzo (PSOE), Melisa Rodríguez (Ciudadanos), Teresa Jordà (ERC), Idoia Sagastizabal (PNV) y Lourdes Ciuró (Grupo Mixto). Podemos no ha aceptado enviar siquiera a alguien de perfil bajo. Y lo que resulta más insólito, ni siquiera a su representante en la Mesa del Congreso, Gloria Elizo, algo que algunos en el Congreso tachan de "grave falta de respeto institucional".
Diputadas y trabajadoras de Podemos, reivindicando el 8-M en el último pleno del Congreso.
Pero Montero y sus diputadas van a dar también la espalda a un acto muy esperado en el Congreso, por pionero y también un empeño de Ana Pastor. Se trata de la presentación de la primera edición del premio de periodismo parlamentario Josefina Carabias. La puesta de largo de este premio, que rinde homenaje a la primera periodista profesional y que también se celebrará en el salón de Pasos Perdidos, contará con la presencia de Mercedes Rico-Godoy, hija de Josefina Carabias.
La actitud de Montero y su grupo parlamentario contrasta con el activismo que han mantenido en las últimas semanas en favor del reconocimiento del papel de la mujer, la última este mismo martes tras la reunión de la Junta de Portavoces.
Podemos ya ha confirmado que todos sus diputados y trabajadores secundarán la huelga y asistirán a todos los actos convocados con motivo del 8-M... en la calle. Lo propio van a hacer todas las concejalas de Ahora Madrid, con Rita Maestre a la cabeza, y las representantes del partido morado en ayuntamientos y parlamentos autonómicos de toda España. Cuestión de prioridades, ahora parece que la calle manda sobre las instituciones.