La 'España Ciudadana' empuja para borrar al separatismo de las instituciones
Rivera saca pecho en Málaga destapando la fórmula para acabar con el nacionalismo sin necesidad de ilegalizarlo: sacarlo del Congreso con la fuerza de los votos.
Albert Rivera tiene una fórmula para acabar con el separatismo democráticamente. Y sin necesidad de ilegalizar a los partidos que defiendan la independencia, con un cambio constitucional complejo que equipararía la Carta Magna con las de Francia o Alemania, por ejemplo.
Hay un camino más rápido y menos complejo que el líder de Ciudadanos ha destapado hoy en Málaga, segunda parada de la puesta de largo por todo el país de 'España Ciudadana', la plataforma transversal impulsada por C's: modificar la ley electoral, para que no se pueda entrar en el Congreso sin lograr un 3% de los votos nacionales.
En el acto, ante un auditorio de más de 4.000 personas, han participado también el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, la escritora e investigadora andaluza María Elvira Roca, la magistrada María José Torres, el empresario Kike Sarasola y el entrenador de baloncesto y exseleccionador Javier Imbroda.
Rivera ha asegurado que si se quiere abrir el debate de reformar la Constitución Española, que sea "para mejorar y fortalecer España, no para debilitarla y liquidarla"; más concretamente, ha dicho que no debe hacerse para "contentar a Puigdemont, a Torra y a los separatistas".
Vigilando a Sánchez
Y en la línea de su propuesta, que necesitaría del consenso con PP y PSOE, ha recordado que en la actualidad un "0.5% o un 0.7%" de las papeletas está decidiendo quién gobierna en España -en alusión al apoyo de Bildu a Pedro Sánchez- o cuáles son los Presupuestos Generales del Estado, en referencia al PNV.
Buena parte del mensaje de Rivera, cuyos orígenes familiares por vía materna están en Málaga, fue dirigido de forma directa o implícita al nuevo presidente del Gobierno, de quien Ciudadanos recela especialmente. Su acceso a La Moncloa con el apoyo de PdeCat, PNV, ERC y Bildu y las concesiones posteriores ha activado todas las alarmas en el partido naranja, que tiene pensado redoblar sus esfuerzos para parar al nacionalismo.