Anna Gabriel y Marta Rovira podrán seguir en Suiza: invita la Generalitat

Reconocimiento público y dinero fresco de la Generalitat. La situación de la exdiputada de la CUP Anna Gabriel y de la secretaria general de ERC, Marta Rovira, fugadas en Suiza, puede cambiar radicalmente en los próximos días. O así lo sospechan los partidos constitucionalistas del Parlament.

Gabriel y Rovira recibieron el sábado la llamada Flama del Canigó, la tradicional llama símbolo del catalanismo que se utiliza para iluminar las hogueras de San Juan. En esta edición, Òmnium decidió trasladarla también a Hamburgo, donde está el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont; Bruselas, donde están los exconsellers Toni Comín, Meritxell Serret y Lluís Puig; Ginebra, donde están Gabriel y Rovira; y Edimburgo, donde está la exconsellera Clara Ponsatí.

Pero Gabriel y Rovira afrontan una necesidad más imperiosa: un trabajo y unos ingresos que les permitan vivir legalmente en Suiza, cuyos requisitos jurídicos son mucho más estrictos que en España. De hecho, a la exdiputada de la CUP se le acabó el plazo el pasado 20 de mayo. Se cumplieron tres meses desde que huyó a Suiza, el tiempo máximo que las autoridades suizas permiten a los ciudadanos de la UE estar en su país sin regularizar su situación.

Para quedarse, Gabriel necesita un permiso de residencia e inscribirse en el registro municipal correspondiente, el de Ginebra en este caso. Y para ambas cosas necesita acreditar que tiene trabajo o, como poco, "medios financieros suficientes para no tener que recurrir a la asistencia social durante su estancia". Situación similar a la que se encuentra Rovira.

Pero la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa, el levantamiento del artículo 155, y el fin del control del Ministerio de Hacienda a las arcas de la Generalitat han sido un soplo de aire fresco para las dos fugadas. Por el momento, tal como anunció el pasado día 14 el consejero de Exteriores, Ernest Maragall, esta misma semana va a reabrir su puerta la embajada de la Generalitat en Ginebra.

En segundo lugar, el vicepresidente catalán y consejero de Economía, Pere Aragonés, el más próximo colaborador de Marta Rovira en ERC hasta su huida, tiene manos libres para disponer de los recursos públicos y destinarlos donde quiera.

Por eso, según explican fuentes de Ciudadanos y del PP catalán a ESdiario, ambos partidos van a estar muy vigilantes ante el previsible trato de favor que van a recibir Gabriel y Rovira del nuevo Govern de Quim Torra. Sospechan que ambas van a recibir empleo y sueldo a cargo de todos los catalanes.