Cospedal y los elogios de ZP propinan a Soraya un doble revés en la recta final
Los de Sáenz de Santamaría temen que el paso al frente de la aún secretaria general en favor de Casado sea el empujón que necesitaba Núñez Feijóo para dar también uno. Se acerca la hora.
Soraya Sáenz de Santamaría sufrió este lunes un doble revés, al comienzo de una semana decisiva que acabará el sábado con la elección del nuevo presidente del PP. O presidenta.
Por una parte, su candidatura se vio sacudida por la onda expansiva llegada desde el madrileño Hotel Palace, donde María Dolores de Cospedal respaldó públicamente a Pablo Casado. De quien afirmó que es una "magnífica opción" para liderar el partido.
Y no solo ella, porque el exvicesecretario de Comunicación del PP ha logrado en los tres últimos días concitar el apoyo del resto de precandidatos que estuvieron en la primera ronda. Desde José Ramón García Hernández, con quien ha colgado este vídeo en Twitter, a José Manuel García-Margallo y Elio Cabanes, que asistieron el domingo a un acto suyo en Gandia:
Por otra parte, y en paralelo, la exvicepresidenta recibió dos manos al cuello: las de José Luis Rodríguez Zapatero y Rosa Díez.
El expresidente socialista y la exlíder de UPyD manifestaron públicamente sus preferencias por la exvicepresidenta ante Pablo Casado, dos apoyos altamente nocivos para su candidatura dada la mala prensa que tienen ambos entre la militancia del PP.
Zapatero alabó a Sáenz de Santamaría durante un curso de la Universidad Complutense de Madrid en El Escorial, de la que destacó su carácter "dialogante" frente al "retroceso en materia de ideas y de derechos y libertades" que insinuó que supondría Casado.
Y Díez reprobó desde su cuenta de Twitter a Casado con estas palabras:
Los últimos movimientos de Casado están provocando inquietud en las filas sorayas, demasiado ocupadas en encontrar -sin éxito hasta ahora- la forma de demostrar que su rival está detrás del famoso vídeo a lo Cuéntame; el que critica el contrasentido de que alguien con tanto pasado como Javier Arenas sea el que decida el futuro del partido.
La noticia de la comida de Casado con los presidentes regionales del PP de Navarra, Asturias, Aragón y La Rioja ha escocido a los de Soraya. Estos temen, además, que el paso al frente de Cospedal en favor de Casado sea el empujón que necesitaba Alberto Núñez Feijóo para dar también uno.
Sáenz de Santamaría estuvo este lunes en Galicia con el presidente regional, pero no consiguió de él más que el mismo llamamiento a la unidad que ha venido haciendo desde el resultado de la primera vuelta (entendiendo que éste se puede producir, según él mismo aclaró, antes, durante o después del Congreso).
En el PP muchos dan por hecho que Feijóo está con Casado, pero que lo hiciera público en estos últimos compases sería un espaldarazo solo comparable al de Cospedal. En ésas está el exvicesecretario.
Por lo pronto este lunes sumó a su lista de apoyos explícitos el del presidente de Murcia, Fernando López Miras, que en una reunión con los compromisarios del PP murciano proclamó su voto a los cuatro vientos: "Las dos candidaturas son imprescindibles y necesarias para el futuro de la Región de Murcia. Yo votaré la candidatura de Pablo Casado", anunció.