Iglesias medió en una trifulca con la Policía en la que se vio envuelta su madre
María Luisa Turrión estaba en cabeza de la protesta de pensionistas que este miércoles derivó en bronca frente al Congreso. La intervención de su hijo fue clave para serenar los ánimos.
Los ánimos están muy caldeados entre los pensionistas por el "intolerable trate" que, a su juicio, recibieron este miércoles en los aledaños del Congreso.
Como cada semana, varios cientos de ellos se manifestaban para pedir pensiones dignas y que éstas se revaloricen conforme al IPC.
La protesta transcurría como en cualquier otra ocasión hasta que un grupo de ellos intentó levantar una valla y superar el cordón policial, ante lo que los antidisturbios actuaron.
Hubo forcejeos en los que se vio implicada la madre de Pablo Iglesias, María Luisa Turrión, muy activa en la causa de los pensionistas. Ésta llegó a pedir la dimisión del delegado del Gobierno por el trato dispensado a los manifestantes:
Su hijo salió de la Cámara Baja para intentar mediar, en compañía de varios diputados de Unidos Podemos. Entre ellos Rafa Mayoral y Gloria Elizo, que cayó al suelo durante la refriega.
Iglesias consiguió apaciguar los ánimos y acabó agradeciendo a la Policía que les hubiera permitido intervenir:
Su madre, por contra, terminó pidiendo que rodaran cabezas por lo que llamó "una actuación deleznable".