Vox revienta Vistalegre pese a los vetos y confirma que Santi Abascal sube
Gesto de fuerza de Vox que, sin ningún respaldo de la televisión, ha llenado Vistalegre, el antiguo feudo de Podemos hoy repleto de seguidores del partido de Santiago Abascal.
La izquierda política y mediática se desgañita presentando a Vox y a su líder, Santiago Abascal, como "la ultraderecha". Pero a sus seguidores parece no importarles y, pese a que la televisión prácticamente ignora por completo a este partido, los sondeos menos cocinados empiezan a dar por factible su desembarco en el Parlamento en las próximas Elecciones. Incluso el último CIS ya le concedía un escaño.
Una señal de fuerza se ha vivido este domingo en Madrid: Vox ha llenado el Palacio de Vistalegre de Madrid, el mismo que Podemos quiso hacer suyo, con unas 10.000 personas, según la organización, de la "España viva", una España que ha "resucitado" y contará con representación parlamentaria en las próximas elecciones generales, según Abascal.
A su juicio, el partido "desbordará" las urnas porque han sido "demasiados los ultrajes" a España y una "nación no despierta del letargo por casualidad, sino cuando la molestan". "Somos ahora la resistencia", ha expresado.
El partido ha dado a conocer sus 100 medidas para el país, pero también donde ha cargado duramente contra el resto de partidos, refiriéndose al PP como la "derechita cobarde", a Ciudadanos como "la veleta naranja", al PSOE como "traidores" y "estafadores", y a Podemos como el partido de las "recetas fracasadas del comunismo".
Contra el separatismo
Bajo los gritos de 'Presidente, presidente', miles de personas han apoyado a Abascal, quien ha reivindicado el papel de Vox como "herramienta al servicio de España" que se encargará de "reconquistar su grandeza", haciendo un llamamiento a sentir "orgullo" por su país y a comportarse con "dignidad, decoro y honor", en definitiva, "sin miedo". "No hemos venido a ganar en España, sino a que España gane con nosotros", ha señalado.
Abascal también ha hecho un llamamiento a "señalar a los culpables de la división y ruina de España" y a "combatirles", pues para él, la "España viva" a la que se refiere es la España que quiere la disolución de los Mossos d'Esquadra, la suspensión de la autonomía de Cataluña, la ilegalización de los partidos separatistas y que quieren "una España y no 17".