Sánchez encuentra la excusa para romper con Casado tras ignorarle durante meses

El bronco debate protagonizado este miércoles en el Congreso por Pedro Sánchez y Pablo Casado ha derivado en la ruptura formal de relaciones entre el Gobierno y el principal partido de la oposición.

Así lo anunció La Moncloa pasadas las once de la noche, con el argumento de que Casado ha perdido el "respeto institucional".

Ello es la consecuencia de la acusación que Casado había hecho horas antes al presidente en sede parlamentaria: "¿Usted no se da cuenta de que es partícipe y responsable de un golpe de Estado que se está perpetrando ahora mismo en España?".

Durante el debate Sánchez pidió reiteradamente al presidente del PP que retirara esa acusación y le pidiera perdón, advirtiéndole de que si no por su parte no tendrían nada más que hablar. Pero el popular no lo hizo.

A lo largo de la tarde los ánimos se fueron caldeando, con cruce de reproches desde uno y otro lado. Como contó ESdiario, Casado en ningún momento tuvo la más mínima intención de retractarse, así que solo quedaba la ruptura.

La respuesta del PP no se hizo esperar: "El que se hace el ofendido ha perdido el debate. España le pide a Sánchez que rompa con los que están en la cárcel por intentar un golpe al estado, no con el PP que le ofrece los votos del senado para aplicar el 155 y restaurar el orden constitucional en Cataluña".

Los populares sostienen, asimismo, que Sánchez ya había roto de facto con ellos antes, puesto que desde el 2 de agosto en que se reunió con Casado en La Moncloa no ha vuelto a contar con él para nada.