Leonor defiende la monarquía parlamentaria en su debut y emociona a la Reina
La heredera de la Corona hace oír por primera vez y con soltura su voz con la lectura del artículo 1 de la Constitución, que alude también al Estado de Derecho y la soberanía nacional.
No han sido palabras suyas, sino unas muy bien escogidas del texto la Constitución; aquellas que apelan a la monarquía parlamentaria como nuestro modelo de Estado y de la que ella es un símbolo. Pero le han valido a la Princesa Leonor para hacer oír su voz, fresca y risueña, por primera vez en público.
El momento y los lugares escogidos para esta primera intervención en público de la heredera han estado también muy escogidos cargados de simbología. Se han hecho coincidir el 40 aniversario de la aprobación de la Carta Magna en las Cortes y con el 13 cumpleaños de la heredera de la Corona para una lectura pública del texto constitucional en la sede madrileña del Instituto Cervantes, como forma de reforzar así el poder de la palabra en nuestra lengua.
La Princesa se ha encargado junto a su padre, el Rey Felipe VI, de iniciar esta lectura pública de la Constitución a la que han acudido las principales autoridades políticas e institucionales de nuestro país. Un acto que el jefe de Estado ha descrito como la mejor forma de "reafirmar, una vez más, la fidelidad y el compromiso de la Corona con la democracia, con la libertad, con España y la Constitución española".
Felipe VI ha pronunciado estas palabras antes de iniciar la lectura del Preámbulo, que establece el deseo de la nación española de "garantizar la convivencia democrática dentro de la Constitución y de las leyes conforme a un orden económico y social justo" y "consolidar un Estado de Derecho que asegure el imperio de la ley como expresión de la voluntad popular".
También habla de "proteger a los españoles "y pueblos de España en el ejercicio de los derechos humanos, sus culturas y tradiciones, lenguas e instituciones", promover la cultura y la economía, "establecer una sociedad democrática avanzada" y contribuir a unas relaciones internacionales pacíficas.
A continuación, el monarca se ha quedado a un lado del atril mientras su hija mayor ha subido a la tribuna y ha leído los tres puntos del artículo 1, con voz infantil, gran soltura y mirando cada poco, sonriente, al auditorio congregado.
"Uno, España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político. Dos, La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado. Tres, la forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria", ha leído.
Después, entre aplausos, ha besado a su padre y, al bajar de nuevo al patio de butacas, también a su madre, la reina Letizia, que estaba en primera fila con la Infanta Sofía; sonrientes y emocionadas espectadores de sus primeras palabras en público.