Rufián sale en defensa de Leticia Dolera, muda y machacada por casi todos

Sola, abandonada y enmudecida. Así está Leticia Dolera, la actriz que está viviendo un caso similar al de Asia Argento: de cabecillas del movimiento #MeToo, a protagonistas de los mismos comportamientos que denunciaban. La americana `por abusar sexualmente de un menor; la española por despedir a una actriz, Aina Clotet, por estar embarazada.

Lo máximo que ha logrado Dolera es el respaldo de personas como Gabriel Rufián, diputado de ERC de Cataluña, que se posicionó a su favor pese a conocerse ya el durísimo comunicado en el que Clotet narraba con pelos y señales cómo fue separada de la serie dirigida por Dolera pese a ofrecerle todas las alternativas para hacer viable su papel en ella incluso con la gestación avanzada.

Rufián, en uno de sus mensajes habituales, acusó a los medios de comunicación de inducir una opinión pública adversa contra Leticia Dolera mientras se insuflaba otra positiva hacia Ana Patricia Botín, en un tuit marca de la casa:

Pero el apoyo del polémico político independentistas fue una excepción. Todo lo más, el "universo" institucional feminista de políticos, periodistas y activistas, miró para otro lado e ignoró un episodio que, con otro protagonistas, hubiera suscitado una tormenta. Ni Irantzu Varela ni Towanda Rebels ni Ángeles Álvarez, por citar tres nombres clásico de la movilización feminista, tuvieron nada que decir del caso.

Sí lo hicieron miles de ciudadanos, a través de las redes sociales, y notables personajes del mundo del cine, lo que le da una dimensión mayor a su crítica. De todos ellos, la actriz Toni Acosta es el ejemplo que los resume a todos, con un mensaje igual de demoledor en favor de Clotet y en contra de la justiciera ajusticiada.