Sánchez enchufa a Trujillo en recompensa por su juego sucio contra Susana
La extitular de Vivienda con Zapatero fue una de las más furibundas antisusanistas en la guerra de las primarias. Ahora, el presidente le devuelve el favor con un sueldo público.
A la exministra socialista de Vivienda, María Antonia Trujillo, le ha tocado su particular gordo de la Lotería. En este caso, el bombo de La Moncloa con los destinos que acarrean una jugosa nómina a cuenta del erario público. Pedro Sánchez envía a Trujilo a la embajada de España en Marruecos a dedo, como consejera de Educación de la legación diplomática.
No está entre sus aptitudes y experiencia el área educativa. Trujillo fue titular del Ministerio Vivienda en la primera legislatura del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. Y encadenó varias polemicas, como sus famosos minipisos de 30 metros cuadrados en su plan estatal de vivienda.
Eso sí, la exministra extremeña se significó durante la guerra en las primarias entre Sánchez y Susana Díaz por sus furibundos ataques al bando susanista.
El nuevo puesto de Trujillo en Rabat es de libre designación y depende del Ministerio de Educación que dirige Isabel Celaá. El cargo y la nómina pública va acompañada del correspondiente pasaporte diplomático.