Page lanza un piropo a Albert Rivera con mensaje oculto para Moncloa e Iglesias

Los barones del PSOE comienzan a moverse. Y a marcar distancias con la política de pactos de su jefe de filas, Pedro Sánchez, tan dañina para los intereses de Susana Díaz en Andalucía. Uno de los que se apunta a alejarse de los socios de su secretario general, es el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.

Page, que este sábado ha concedido una entrevista a Europa Press, gobierna en coalición con Podemos. Pero, ahora, parece mirar hacia otro lado, en concreto a Ciudadanos. Preguntado por este extremo, el barón socialista no se moja, pero habla entre líneas.

Niega haber "coqueteado" con los naranjas de cara a facilitar un hipotético pacto de Gobierno, como así sugería esta semana el secretario general de Podemos, José García Molina.

"Yo no coqueteo con nadie, pero Ciudadanos es una opción que probablemente tenga mucho que ver con el futuro del Gobierno de España", reconoce. "Y sigo pensando que la solución a este país en el medio plazo vendrá de una posición lo más troncal posible, y no de una solución periférica o desde los extremos", subraya.

Y se desmarca de los de Pablo Iglesias. Sobre Podemos el presidente castellano-manchego advierte de que, en el conjunto de España, "ha bajado notablemente" su expectativa electoral. "De hecho, lo más llamativo del resultado electoral en Andalucía es que el desgaste del PSOE no ha ido a parar a Podemos. Al contrario, se ha desgastado mucho más Podemos, y esa sí que es una lección de fondo", avisa García-Page.