La "alerta antifascista" de Pablo Iglesias puede ser juzgada como delito de odio

Llamó a combatir el "franquismo" tras la arrolladora irrupción de Vox en el Parlamento andaluz el pasado 2 de diciembre. Y puede que Pablo Iglesias tenga que responder por ello ante la Justicia por representar una insensata arenga para los más extremistas y un alarde de odio hacia un partido político y sus simpatizantes

La Fiscalía Superior de Andalucía ha recibido una denuncia contra el líder nacional de Podemos y su homóloga andaluza, Teresa Rodríguez, acusados de un posible delito de incitación al odio por hacer un llamamiento contra la "extrema derecha" tras la votación en las elecciones andaluzas.

La denuncia, adelantado por el periódico Ideal, la firman los hijos del fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) asesinado por ETA Luis Portero, Luis y Daniel Portero, al considerar que los dos dirigentes de Podemos pueden ser responsables de un delito de incitación al odio por motivos ideológicos.

Los dos hermanos han formalizado la denuncia ante la Fiscalía contra Iglesias y Rodríguez por las intervenciones públicas que realizaron tras los resultados de las últimas elecciones andaluzas del pasado 2 de diciembre, discursos en los que solicitaron actuar contra la "extrema derecha".

En la denuncia, los hermanos Portero aportan las declaraciones de los dos responsables de la formación morada y argumentan que el posicionamiento contrario al resultado de Vox, que obtuvo doce diputados, motivó "numerosas manifestaciones".

Protestas violentas

El escrito recuerda que diferentes provincias andaluzas y de otros puntos del país repitieron la noche del 2 de diciembre y posteriores manifestaciones y marchas que, en Granada, recorrieron Camino de Ronda, forzaron el corte del tráfico y dejaron lunas de escaparates rotos y otros daños.

Según los denunciantes, las protestas tienen como detonante la llamada a las movilizaciones de Iglesias, que habló de "alerta antifranquista", y de Rodríguez, a los que han reprochado su reacción ante el éxito de Vox y el apoyo de sus 50.000 votantes.

Los hermanos Portero han interpretado que las declaraciones de los dirigentes de Podemos representan un posible delito de incitación al odio "por razón de la ideología, contra un partido político, sus militantes y votantes" y que con sus palabras han fomentado "un clima social de rechazo, hostilidad y odio profundo".

Han pedido además a la Fiscalía que solicite a la Policía Nacional y la Guardia Civil informes sobre las manifestaciones que se celebraron el pasado 3 de diciembre y sus consecuencias y que apunten los destrozos causados y las frases y eslóganes coreados. También que se identifique a los convocantes y organizadores y que se cita a declarar a Iglesias y Rodríguez.