Abascal profetiza que el acoso violento contra Vox le llevará a Moncloa
Cree que los ataques que sufren son por haber desenmascarado a la "dictadura progre" y revela que han pedido protección a Interior para sus actos pero aún no han obtenido respuesta.
Toda la violencia que están sufriendo los miembros y simpatizantes de Vox no hará más que acercar a este partido a la victoria a las elecciones generales. Así lo piensa Santiago Abascal que, no obstante, ha pedido amparo a Interior sin que aún haya obtenido respuesta.
El presidente de Vox ha avisado este lunes de que las apelaciones a crear un cordón sanitario contra su partido o las llamadas "antifascistas" del líder del Podemos, Pablo Iglesias, están generando un "clima peligroso" que deriva en los diversos ataques sufridos durante las últimas semanas.
En una conferencia en el Club Siglo XXI, Abascal ha censurado los incidentes que se han repetido durante este fin de semana en actos de Vox, que ha denunciado que han llegado incluso a "pintadas con amenazas de muerte, golpes con un extintor en la cara a un militante o el lanzamiento de cohetes en actos de terrorismo callejero".
A su juicio, todo ello deriva de las "constantes" apelaciones a la creación de un cordón sanitario contra Vox o la "demonización" del partido como "una cosa nazi con personas peligrosas, violentas y fascistas"; además de las "alertas antifascistas violentas lanzadas por Pablo Iglesias". Según ha subrayado, todos ellos están "detrás" de los ataques que recibe su partido, "unos un grado de responsabilidad y otros en otro".
Según ha revelado, Vox pidió protección al Ministerio del Interior hace aproximadamente un mes ante la escalada de tensión pero aún no han obtenido respuesta. La petición se hizo tanto para sus actos como para sus dirigentes, ya que actualmente solo cuentan con la presencia policial habitual que despliegan las delegaciones del Gobierno para todo acto político.
"Sin tabúes" contra la "oligarquía progresista"
En cualquier caso, Abascal ha avisado de que seguirán difundiendo su mensaje "sin tabúes" y alejado de la "dictadura progre" que ha llevado a la "oligarquía progresista" e incluso un partido "aparentemente moderado" a abogar por excluirles de los pactos políticos.
"Hemos abierto debates prohibidos, temas tabú, hemos conseguido acabar con el régimen socialista en Andalucía", ha celebrado arrogándose el logro de haber "terminado con el chantaje al voto útil" y haber arrancado al PP en Andalucía compromisos como la colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para la identificación de inmigrantes ilegales o una bajada de impuestos.
"Todo ello va a hacer que Vox, más pronto que tarde, termine ganando en las elecciones generales", ha avisado después de desgranar las principales medidas que defiende su formación, como la supresión de las autonomías, la derogación de la ley de violencia de género o la de la memoria histórica.