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Llamazares abandona sus cargos en IU y desata la carcajada en las redes

La descomposición de la coalición ha dejado de producir pena para provocar toda clase de bromas, como las que han arreciado tras al anuncio del excoordinador general de IU.

Llamazares abandona sus cargos en IU y desata la carcajada en las redes

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El hundimiento de la vieja coalición Izquierda Unida (IU) ha dejado de producir tristeza para ser objeto de toda clase de chanzas y burlas, como muestran las reacciones al anuncio de Gaspar Llamazares de abandonar todos los cargos que mantenía en ella.

En concreto, el que fuera coodinador general ha enviado este lunes un escrito al actual coordinador general de IU de Asturias, Ramón Argüelles, para comunicarle su decisión de renunciar a presentarse a las primarias de IU de Asturias así como a su acta de diputado autonómico y su puesto de portavoz del Grupo Parlamentario de IU en la Junta General.

"Por la presente te comunico que al no disponer de argumentos adicionales frente al expediente libelo de la dirección federal, he decidido disculparme de acudir a una reunión que pudiera entenderse como la continuación del mismo en mi propia organización", explica Llamazares en el escrito, aludiendo a la ‘purga’ sufrida por el aparato que ahora lidera Alberto Garzón al haber impulsado el proyecto político Izquierda Abierta.

"Son estas circunstancias que de prolongarse aún más podrían mermar las merecidas expectativas electorales de IU, las que me llevan, no sin tristeza, a apartarme definitivamente de las próximas primarias así como a renunciar a la portavocía y al acta de diputado, ya que de no hacerlo podría poner a los pies de los caballos a la histórica organización de la izquierda de Asturias, algo que no me perdonaría", argumenta. Y concluye quedando "como militante de la izquierda" a "entera disposición" de la dirección de IU de Asturias. "Nos encontraremos juntos y más temprano que tarde en su reconstrucción", espera.

Y el anuncio ha tenido contestación inmediata en las redes con una interminable cadena de burlas; todo un contraste con la solemnidad que le ha querido otorgar Llamazares a su mensaje: