El Cristo de Mena y la Legión hacen vibrar a España y Podemos se lleva un repaso
El "otro CIS" ha vuelto a hablar dando respuesta a los partidos que han hecho del ataque a las tradiciones y los símbolos de España su razón de ser. Un año más, sin palabras.
Una nueva lección para la izquierda más radical y el independentismo más marcadamente antiespañol que han hecho del ataque a tradiciones y símbolos su programa político, entre ellos Podemos, ERC, Bildu, PNV o Junts per Catalunya.
Miles de personas, pese a la lluvia, han salido a las calles de Málaga para presenciar este Jueves Santo el desembarco de la Legión en el puerto de la capital y su posterior desfile por el centro histórico, con un nuevo recorrido, hasta llegar a la plaza de Fray Alonso de Santo Tomás, donde se ha llevado a cabo el traslado y la entronización del Cristo de la Buena Muerte y Ánimas.
Aunque la lluvia ha respetado el desembarco, la misma no ha dado tregua al momento del traslado, que se ha podido desarrollar pero de manera más rápida.
Eran las 10.30 horas cuando del buque Furor, perteneciente a la Fuerza de Acción Marítima de la Flota y con base en el Arsenal de Cartagena, y que es la primera vez que desplaza a las unidades de la Legión en la mañana del Jueves Santo a Málaga ya que el tradicional Contramaestre Casado está en fase de reparación, ha desembarcado en el Muelle 2 la Compañía de Honores del Grupo de Caballería Ligero Acorazado 'Reyes Católicos' de la Brigada de la Legión.
Allí, un público multitudinario, además de diversas autoridades militares, civiles y religiosas, esperaban horas antes a que arribara el buque en acto que ha presidido el vicealmirante de la Marina Enrique Torres Piñeyro.
El Palmeral de las Sorpresas ha abierto el camino a los legionarios en su desfile hasta la plaza de Fray Alonso de Santo Tomás, pasando antes por plaza de la Marina, Molina Lario, plaza del Obispo, plaza del Siglo, plaza del Carbón, Calderería, Méndez Núñez, Tejón y Rodríguez, Carretería, Pasillo de Santa Isabel, Pasillo de Atocha, Manuel José García Caparrós, puente de la Esperanza, San Jacinto, y plaza de La Legión Española, llegando así a su destino.
Ya en la explanada de Santo Domingo esperaban cientos de personas en este Jueves Santo para asistir al que es considerado el acto más emblemático de este día, y se ha podido ver, entre otros, al presidente de la Junta, Juanma Moreno; el consejero de Deporte y Educación, Javier Imbroda; el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; la subdelegada del Gobierno, María Gámez; la delegada del Ejecutivo andaluz en la provincia, Patricia Navarro y el vicepresidente de la Diputación Jacobo Florido; así como otras autoridades locales. Justo en este momento la lluvia caía con más fuerza.
Antes de las 12.00 horas, las damas y caballeros legionarios han llegado a la Casa Hermandad de la Cofradía del Cristo de la Buena Muerte y Ánimas y Nuestra Señora de la Soledad, en el barrio de El Perchel. En ese momento, debido a la lluvia, tras cuadrarse, se ha llevado a cabo rápidamente el traslado del Cristo de la Buena Muerte.
Así, una vez dentro de la Casa Hermandad han entonado al unísono la letra de El novio de la muerte, que ha marcado el ritmo con el que han portado la talla del también conocido como Cristo de Mena. De igual modo, las tropas, pese a la lluvia, han desfilado delante del Cristo para rendir homenaje.
Más tarde, mediante un sistema de poleas, y en silencio, se ha depositado al crucificado en el trono, no sin antes saludar a Nuestra Señora de la Soledad.
Posteriormente, los legionarios han abandonado la Casa Hermandad y, tras cantarle una saeta al Cristo de la Buena Muerte, se ha dado por concluido alrededor de las 12.30 horas uno de los actos más significativos de la Semana de la Pasión malagueña; aunque en esta ocasión se ha visto alterado, llevándose a cabo de forma más breve, debido a la lluvia.