Puigdemont se pasea ufano: favor de Sánchez con la fiscalía y entrevista en TV3

Carles Puigdemont está feliz. Si hace apenas una semana su futuro era muy negro, con el Tribunal Supremo rematando el juicio al procés, él huido y en el olvido para muchos y la posible victoria del centroderecha en ciernes; las urnas parecen haber cambiado algo desde el 28A.

Sí, ha perdido frente a ERC, en el anticipo de la batalla por la Generalitat, pero desde entonces no ha dejado de recibir buenas noticias, al menos políticas: una decisión de la Fiscalía, en contra del criterio de la Junta Electoral, le permitirá probablemente ser candidato por Junts per Catalunya en las Europeas si el Tribunal Supremo no dice lo contrario en las próximas horas, con una lectura de fondo que parece denotar un "favor" del Gobierno de Sánchez al final del camino.

Porque el Fiscal siempre es independiente, sí, pero también depende como ningún otro cuerpo del Ministerio de Justicia a través del Fiscal General. El guiño del PSOE al prófugo es, cuando menos, susceptible de ser cierto. Y de algún modo el propio Puigdemont lo ha reconocido este sábado en una intervención pública desde su retiro en Bélgica.

"Me comprometo a ejercer de eurodiputado y espero el compromiso con el respeto a las decisiones de los ciudadanos y al Estado de derecho, estoy convencido de que el Estado español no cruzará esa línea roja", ha explicado con cierta hipocresía, pues a nadie se le olvidan sus críticas contra ese mismo Estado de Derecho cuando adopta decisiones adversas.

El apoyo de TV3

A falta de que el Alto Tribunal adopte la decisión definitiva, el balón de oxígeno para Puigdemont se completa con una entrevista en prime time esta noche en Tv3, tal vez la única televisión pública de Europa que trata de autoridad a un huido de la justicia. Ya lo hizo retransmitiendo incluso su discurso de Navidad de hace dos años.

La "resurreción" de Puigdemont, sobre todo si perdura y le permite lograr acta de eurodiputado (algo que no confirman los sondeos y que plantearía el problema de su detención al tomar posesión), tiene otro efecto más maquiavélico en la política catalana: el PSOE-PSC empató en las Generales con ERC, que se quedó con buena parte del voto de Junts. De remontar éste en las Autonómicas catalanas, quedaría muy abierta la victoria final entre Miquel Iceta y Oriol Junqueras.

No es algo que nadie diga en público, pero la política catalana, y los circuitos subterráneos que llevan hasta Madrid, es un complejo laberinto en el que pocos quieren entrar y casi ninguno sabe salir. De momento, el expresidente se vanagloria de una condición de mártir en el exilio que solo los suyos le reconocen.

Entre ellos, las cinco personas que este sábado le han acompañado en su puesta en escena: los también fugados Toni Comín y Clara Ponsatí y los tres relevos de los candidatos oficiales si el Supremo, al final, les invalida. El abogado de Puigdemont, condenado en el pasado por delitos adscritos a ETA, Gonzalo Boye; la polémica exsocialista Beatriz Talegón y el exalcalde de Barcelona, Xavier Trías. El show nunca puede parar.