El revolucionario plan de Abascal para RTVE que pondrá de los nervios a Mateo
Vox no quiere un parche en los medios públicos. Quiere una revolución para convertirlos en un instrumento "patriótico" en defensa de los valores de España.
Una revolución para transformar la radiotelevisión pública en un instrumento útil contra el populismo y el independentismo. Eso es lo que quiere Vox para RTVE, transformárla al servicio "patriótico" de España.
El Grupo Parlamentario de Santiago Abascal ha pedido impulsar una Televisión Española con "filosofía patriótica" para "combatir el discurso separatista" y "la leyenda negra", así como potenciar las delegaciones territoriales con el objetivo de "poder en un futuro prescindir de los canales autonómicos".
La formación de Abascal defenderá este modelo en la futura Comisión mixta de control de RTVE en el Congreso, según han explicado este martes los diputados Macarena Olona y Manuel Mariscal, que también han presentado un escrito ante la Mesa del Congreso para instar a la repetición del procedimiento abierto de concurso público para la renovación de los miembros del Consejo de Administración de la Corporación de RTVE.
"Vox quiere ser parte activa de ese proceso de selección desde el principio y cumplir así con nuestro compromiso de luchar por una televisión pública al servicio de los intereses de España y no únicamente del Gobierno", ha afirmado Mariscal, que ha expuesto una serie de propuestas recopiladas por su partido tras haberse reunido en las últimas semanas con sindicatos y representantes de los profesionales de la corporación pública.
"La plantilla ve con preocupación la situación que atraviesa la cadena pública, que está en mínimos históricos de audiencia y cada vez más politizada", ha añadido el diputado de Vox, señalando como ejemplo la entrevista "al terrorista Otegi" en el Canal 24 Horas "sobrepasando los límites profesionales y éticos de la casa".
Por ello, Vox ha exigido la "despolitización de los servicios informativos" que, según Mariscal, "van dirigidos al electorado del PSOE y no a todos los españoles", así como el fomento de las producciones propias "reduciendo la producción externa" y la "creación de un verdadero canal internacional" dedicado a "vender la imagen de España en el exterior" y que permita "generar nuevos ingresos vendiendo publicidad en los países donde se emita".
Vox también ha reclamado una renovación de plantilla en TVE para que deje de ser utilizada "para enchufar a los amigos y conocidos", aunque ha descartado apoyar despidos en la corporación. En ese sentido, la formación ha reclamado los contratos firmados con Maxim Huertas y Gemma Nierga, que considera "enchufes políticos".
Además, el grupo parlamentario ha registrado una serie de preguntas escritas dirigas a la administradora única de RTVE, Rosa María Mateo. Entre ellas, una para conocer por qué se denomina a Vox "extrema derecha" en los informativos del ente público.