La ministra de Iglesias atiza a Sánchez donde más le duele: "Se ha susanizado"
A Yolanda Díez, el líder morado la había situado en el Ministerio de Trabajo y al frente de las pensiones. La ruptura con el PSOE dio al traste con su plan y ella dice por qué.
Yolanda Díaz, en un acto de Podemos en Galicia junto a Iglesias.
Es uno de los valores muy alza en Podemos en los últimos tiempos. Y si los planes de Pablo Iglesias le hubieran salido bien, Yolanda Díaz vestiría ahora el traje de flamante ministra de Trabajo. Y en una entrevista, la diputada gallega analiza las causas del fracaso con un argumento que le da a Pedro Sánchez donde más le duele.
Díaz ha culpado al líder del PSOE de que no se llegase a un acuerdo, ya que, a su juicio, Sánchez siguió "una estrategia errónea" en las negociaciones. Al respecto, la diputada ha argumentado que el presidente en funciones quiso gobernar "vetando a Pablo Iglesias", "sin mover ficha" y con una actitud "susanizada" que se muestra en el "deseo" del líder socialista por "pactar con un Ciudadanos" que "a todas luces" no quiere pactar con él.
"La izquierda se equivocará si no se sitúa al lado del pueblo" ha aseverado Díaz acerca del proceso de investidura. En su opinión, la sociedad "no quiere más bipartidismo ni monocolores", sino que los votantes del 28-A han apostado por "fórmulas de coalición" en un "gobierno de progreso y diálogo".
También rechaza la diputada gallega el ejecutivo "a la portuguesa" que ha propuesto el líder socialista, porque gobernar en solitario y depender de los apoyos parlamentarios lo considera "una posición tremendamente errónea" y, por el contrario, ha señalado a seguir el modelo de otros países europeos donde hay gobiernos de coalición.
Con respecto a una posible repetición electoral, Yolanda Díaz ha manifestado que la "ciudadanía está harta" de los políticos y que sería un "error histórico" convocar unas segundas elecciones, como ya ha "amenazado" el dirigente del PSOE. Para la representante de Galicia en Común la actitud de Pedro Sánchez en este sentido "no es una buena forma de negociar" ni de "estar a la altura de las circunstancias" de España.
Por otra parte, Yolanda Díaz también ha sido preguntada sobre las causas de la investidura fallida de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno el pasado 25 de julio. En este sentido, la portavoz ha culpado al líder del PSOE de que no se llegase a un acuerdo, ya que, a juicio de Díaz, Sánchez siguió "una estrategia errónea" en las negociaciones. Al respecto, la diputada ha argumentado que Pedro Sánchez quiso gobernar "vetando a Pablo Iglesias", "sin mover ficha" y con una actitud "susanizada" que se muestra en el "deseo" del líder socialista por "pactar con un Ciudadanos" que "a todas luces" no quiere pactar con él. "La izquierda se equivocará si no se sitúa al lado del pueblo" ha aseverado Yolanda Díaz acerca del proceso de investidura. En su opinión, la sociedad "no quiere más bipartidismo ni monocolores", sino que los votantes de las Elecciones Generales del 28 de abril de este año han apostado por "fórmulas de coalición" en un "gobierno de progreso y diálogo". Igualmente, la portavoz del grupo gallego no apoya el ejecutivo "a la portuguesa" que ha propuesto el líder socialista, porque gobernar en solitario y depender de los apoyos parlamentarios lo considera "una posición tremendamente errónea" y, por el contrario, ha señalado a seguir el modelo de otros países europeos donde hay gobiernos de coalición. "CIUDADANÍA HARTA" Con respecto a una posible repetición electoral, Yolanda Díaz ha manifestado que la "ciudadanía está harta" de los políticos y que sería un "error histórico" convocar unas segundas elecciones, como ya ha "amenazado" el dirigente del PSOE. Para la representante de Galicia en Común la actitud de Pedro Sánchez en este sentido "no es una buena forma de negociar" ni de "estar a la altura de las circunstancias" de España. Por este motivo, Díaz ha asegurado que "con voluntad política" pueden "reconducirse" las negociaciones, siempre y cuando no se "vete constantemente" a Unidas Podemos, ya que sería un "error" no trabajar con un grupo que "representa a cuatro millones de personas".