"Orden de combate": el PSOE pone el aparato del Estado al servicio de Sánchez
El Gobierno pasa a "máxima alerta" para preparar la inminente campaña en septiembre. Moncloa pide a sus ministros que movilice ya a sus funcionarios y prepare "papeles" para el líder
En La Moncloa, y en los distintos ministerios del gobierno de Pedro Sánchez se ha instalado el zafarrancho de combate. En el cuartel general de Presidencia se trabaja desde hace una semana a pleno rendimiento y asesores de los diferentes departamentos del Estado han facilitado agendas y contactos para la frenética ronda de entrevistas que Sánchez ha mantenido esta semana recién finalizada.
De la improvisación con la que el equipo de Iván Redondo decidió virar hace unos días de estrategia -para comenzar a preparar el terreno para el 10-N- da cuenta una anécdota que un invitado a esos encuentros con el presidente en funciones desvela a ESdiario: su organización fue contactada por teléfono, la víspera y por la tarde, de su cita en La Moncloa con Sánchez y la ministra del ramo, en este caso de la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
La Moncloa y la vicepresidenta Carmen Calvo, que preside la decisiva Comisión de Subsecretarios, ha trasladado estos últimos días varios mensajes internos.
Redoblar la agenda de los ministros -este jueves agosteño con España entera en la playa tuvieron actos 10 miembros del gabinete, algo absolutamente inusual-, convocar a Madrid a los principales asesores de cada departamento, planificar las vacaciones y acortar las de algunos funcionarios de peso, y comenzar a recopilar documentación para remitirla a La Moncloa.
Sánchez, este jueves en su reunión con Antonio Garamendi, presidente de la CEOE.
Como es habitual en vísperas electorales, se trata de preparar al presidente-candidato fichas muy concretas con las iniciativas cumplidas de cada ministerio y los proyectos prioritarios que están pendientes. Y añadir las reivindicaciones que las distintas asociaciones "ciudadanas" han dejado esta semana en la mesa de Sánchez. Su ya famoso "compendio".
Y, como hace 48 horas insinuó el portavoz del PSOE y hombre próximo a Sánchez, Óscar Puente, poner en marcha la maquinaria electoral de Ferraz y sus federaciones territoriales. Sánchez se toma ahora unas vacaciones en Doñana y nadie se moverá publicamente en la segunda quincena de agosto.
Pero en la sala de maquinas del poder hay ya un mandato: "zafarrancho de combate". Es decir, poner el aparato del Estado ahora en manos socialistas, al servicio, otra vez, del candidato Sánchez.