Álvarez de Toledo abochorna a Ada Colau denunciando su última "aberración"

La portavoz parlamentaria del PP, Cayetana Álvarez de Toledo, considera "una inmoralidad" y "una abyección" utilizar los atentados islamistas cometidos en Cataluña en agosto de 2017 como un instrumento para cuestionar al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) por sus contactos con el imán de Ripoll y cree que no sería buena idea que ERC y Junts per Cataluña puedan acceder a información clasificada a través de la Comisión de Secretos oficiales del Congreso.

Álvarez de Toledo ha criticado la propuesta que aprobó el Ayuntamiento de Barcelona de pedir una investigación en el Congreso sobre los atentados del 17-A y la relación entre el CNI y el imán de Ripoll, supuesto instigador del comando yihadista. La iniciativa salió adelante con la suma de ERC, Junts y En Comú.

A su juicio, "la falta de respeto a las víctimas del terrorismo del 17A en Las Ramblas de Barcelona es una inmoralidad y una abyección", y admite su sorpresa ante esa actitud: "Hay límites que se traspasan en la obsesión antiespañola. Me sorprende incluso a mí que hagan eso".

La que fue cabeza de lista del PP por Barcelona recuerda que "ya lo hicieron cuando montaron una manifestación que tenía que haber sido un homenaje a las víctimas y lo convirtieron en una manifestación contra el Estado, el Rey y España". "Y que ahora usen una vez más ese atentado y sus muertos para lanzárselos a la cara del CNI, del Estado, es una nueva muestra de su catadura moral".

La dirigente del Grupo Popular no sólo dirige sus críticas a ERC y Junts, que promovieron esa iniciativa de Barcelona, sino también a En Comú, que la apoyó en el Consistorio. "Es una aberración", apostilló en referencia al partido de Ada Colau.

En cuanto a la posibilidad de que esos mismos partidos puedan acceder a los secretos oficiales gracias a la presencia de su portavoz parlamentario en la Comisión de Gastos Reservados que, entre otras cosas, controla la actividad del CNI, Álvarez de Toledo opina que no sería buena idea.

"Probablemente entregarles los secretos oficiales del Estado a partidos cuyos líderes dicen que volverían a dar un golpe de Estado no sea la más brillante de sus ideas", ha resumido.

El voto de formaciones como el PP y Ciudadanos es imprescindible para que ERC, con grupo parlamentario propio, y Junts, como primera fuerza del Grupo Mixto, puedan entrar en la conocida como Comisión de Secretos Oficiales, ya que sus integrantes, uno por formación, precisan del apoyo de al menos 210 diputados para ser autorizados por el Pleno del Congreso.