Sánchez diseña un Gobierno gigantesco con más ministros que en la Transición
El Gabinete será, muy probablemente, el mayor de la democracia y el más caro debido a las exigencias de los de Iglesias y a la intención del presidente de partir algunas carteras en dos.
La cartera negra de piel con el escudo del Reino de España que llevan todos los ministros va camino de convertirse en el regalo estrella de estas navidades en el PSOE y en Unidas Podemos. En la coalición que lidera Pablo Iglesias todos quieren una: primero fue él mismo, después Irene Montero, más tarde los comunes de Ada Colau y ahora también Alberto Garzón la desea.
El Consejo de Ministros que viene será muy probablemente el más numeroso de la democracia, uno de récord, mastodóntico. Ello por las exigencias de los morados y por la intención de Pedro Sánchez de partir en dos algunos de los ministerios ya creados para no dar a los de Pablo Iglesias más competencias de las estrictamente necesarias. El que parte y reparte, ya se sabe.
Así las cosas, y aunque las negociaciones para ese Gobierno de coalición se llevan con discreción, socialistas y morados hablan ya de un Gabinete con no menos de una veintena de ministros y tres vicepresidencias: la Política para Carmen Calvo, la Económica para Nadia Calviño y la Social para Pablo Iglesias.
Por encima de todos ellos, por descontado, Pedro Sánchez, lo que elevaría a 24 el número de miembros del Gabinete, al menos. En toda la democracia, en las 12 legislaturas transcurridas, solo hay un precedente de un Ejecutivo tan concurrido. Fue en la primera legislatura, la que arrancó en abril de 1979 bajo la Presidencia de Adolfo Suárez.
El primer Gobierno constitucional y el más numeroso hasta la fecha, el de 1979.
Aquel Gobierno, el primero constitucional, contaba con 24 integrantes: Suárez, dos vicepresidentes (Manuel Gutiérrez Mellado y Fernando Abril Martorell) y 21 ministros. De ellos, tres sin cartera, por si Sánchez quiere ir cogiendo ideas (Joaquín Garrigues Walker, Leopoldo Calvo-Sotelo y Rafael Arias-Salgado).
Desde entonces, los sucesivos gobiernos de España han oscilado entre los 12 y los 19 miembros. El más contenido fue el último de Mariano Rajoy antes de la moción de censura: eran él y 11 ministros. José Luis Rodríguez Zapatero se fue a 17 ministros -más él- en su segunda legislatura y acabó teniendo que recortar cuando la crisis le estalló en la cara. Prescindió de Igualdad y de Vivienda. Y el récord de Felipe González fueron 18+1 (él).
Y por una sencilla regla de tres, todo aumento de ministerio lleva aparejado uno no menor de secretarías de Estado. Con sus consiguientes presupuestos y personal adscrito.
De momento fijos en ese Gobierno de coalición serían Sánchez, Calvo, Calviño, Iglesias, José Luis Ábalos y Teresa Ribera, esta última ministra para la Transición Ecológica. Se especula con que Isabel Celáa no seguirá siendo portavoz, independientemente de que conserve la cartera de Educación o no.
Asimismo pintan bastos para Pedro Duque y Magdalena Valerio, puesto que Universidades y Trabajo son competencias que ha pedido Iglesias para su gente. Éste señaló este jueves que confía en que los españoles tengan un Gobierno antes de Nochebuena. Y queda menos de un mes.