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La nueva jefa en Bruselas se estrena y da la peor de las noticias a Puigdemont

Los independentistas se frotaban las manos con la "jubilación" de Juncker, Tusk y Tajani, azote de la Generalitat durante el procés. Pero sus sustitutos les van a borrar la sonrisa.

Se va Juncker, llega Von der Leyen. Pero sobre Cataluña, la firmeza europea no cambia.

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La peor de las noticias ha llegado este martes al casoplón de Waterloo, el escondite del prófugo Carles Puigdemont.

El independentismo se frotaba las manos con la salida del tridente europeo que les ha puesto en su sitio todo este tiempo: Jean Claude Juncker (Comisión), Donald Tusk (Consejo) y Antonio Tajani (Parlamento). Pero nada va a cambiar pese a bulos, maniobras y amenazas.

La llegada de la conservadora alemana Ursula von der Leyen al frente de la Comisión Europea para relevar a Juncker "no cambia" la posición del Ejecutivo comunitario respecto a que el desafío independentista en Cataluña es un asunto "interno de España" que debe ser resuelto dentro de los límites de su Constitución.

"Nuestra posición es bien conocida y no ha cambiado, es un asunto interno de España que debe ser resuelto de acuerdo a su orden constitucional", ha declarado en una rueda de prensa en Bruselas el portavoz comunitario responsable de Justicia y Estado de derecho, Christian Wigand.

De este modo, el Ejecutivo comunitario zanja la petición de un grupo de eurodiputados que en una carta promovida la semana pasada por la eurodiputada de ERC, Diana Riba, llamaba a Von der Leyen a asumir el papel de "mediador" entre el Gobierno y las autoridades catalanas para una "solución política" en Cataluña.

La carta, firmada por Riba -en nombre del expresidente de Cataluña Carles Puigdemont, el líder de ERC, Oriol Junqueras, y el exconseller Toni Comín- y un grupo de 40 eurodiputados, tendrá una respuesta formal de parte de la Comisión, "como ocurre en todos los casos", ha explicado el portavoz.

Los eurodiputados reclaman en el escrito la mediación internacional para presionar a España para que emprenda "los necesarios cambios en su sistema legislativo" para atender a las demandas de los independentistas, además de criticar la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes del procés y pedir que los condenados sean puestos en libertad.