La foto que dará un quebradero de cabeza al Rey antes de su mensaje navideño
La cárcel de Brieva da luz verde al primer permiso penitenciario del cuñado del Monarca. Será de cuatro días en las fiestas navideñas. La última palabra la tiene el juez.
Es posible que en estos próximos días, mientras el Rey Felipe comience a diseñar su mensaje tradicional de Nochebuena a los españoles, una frase de su padre en el mismo escenario le ronde por la cabeza. "La ley es igual para todos", sentenció Don Juan Carlos en su discurso de 2011, con el caso Urdangarin en plena ebullición.
Ahora, ocho años después, sobre La Zarzuela la alargada sombra del cuñado del Monarca volverá a planear. Y con el escenario político en ciernes, previsiblemente, no para bien. Por que la fotografía que se avecina va a tener legión de detractores.
La Junta de Tratamiento de la cárcel de Brieva ha autorizado este jueves que Urdangarin disfrute durante las fiestas navideñas de cuatro días en su primer permiso ordinario, según han confirmado fuentes penitenciarias. El juez de Vigilancia Penitenciaria tiene ahora que ratificar esta respuesta favorable del centro penitenciario.
El marido de la Infanta Cristina pidió siete días de permiso y la junta de tratamiento ha aprobado que duerma fuera de prisión cuatro días. El procedimiento establece que el juez de Vigilancia Penitenciaria es quien tiene la última palabra sobre la concesión de este tipo de permisos, tanto si hay disconformidad con la decisión de la cárcel por parte del preso como si es por parte de la Fiscalía.
Urdangarin lleva 17 meses en prisión y la semana pasada cumplió una cuarta parte de su condena a cinco años y diez meses por el caso Nóos. Como ocurre con cualquier otro preso clasificado en segundo grado, Urdangarin puede pedir permisos ordinarios para salir de la cárcel con un máximo de 36 días al año -18 días por semestre-, aunque sin poder sumar más de una semana de forma consecutiva.
El juez ya le concedió en septiembre a Urdangarin un permiso para asistir de voluntariado a un hogar religioso en Pozuelo, de acuerdo al artículo 117 del Régimen Penitenciario sobre "medidas regimentales para la ejecución de programas especializados para penados clasificados en segundo grado", como es el caso del cuñado del Rey.
Le autorizó a salir dos veces por semana y un máximo de ocho horas al día. La decisión fue respaldada por la Audiencia Provincial de Ávila al rechazar el recurso de la Fiscalía.
De esta forma, fue el 19 de septiembre cuando Urdangarin salió por primera vez del módulo de Brieva que eligió de forma voluntaria tras ser condenado por delitos de prevaricación continuada y malversación (ambos en concurso), tráfico de influencias, fraude a la Administración y dos delitos fiscales. El marido de la Infanta está desde entonces en un módulo en el que no hay otros presos, ya que la de Ávila es una cárcel de mujeres.
Los permisos ordinarios a los que ahora se puede acoger el cuñado del Felipe VI están regulados en el artículo 154 del Régimen Penitenciario. De acuerdo a la norma, se pueden conceder permisos, "previo informe preceptivo del Equipo Técnico", para la salida ordinaria "de hasta siete días de duración como preparación para la vida en libertad".
Estos permisos son hasta un total de 36 días para los penados clasificados en segundo grado o de hasta 48 días para los que estén en tercer grado, "siempre que hayan extinguido la cuarta parte de la condena o condenas y no observen mala conducta".
Antes de su ingreso en prisión en junio de 2018, la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo rebajó en cinco meses la condena al exduque de Palma, pasando de los seis años y tres meses de la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca a la condena firme de cinco años y diez meses por varios delitos relacionados con la actividad del Instituto Nóos. La Fiscalía había pedido un incremento de la pena de hasta diez años.
Una vez que ingresan en prisión, los reclusos tienen un límite temporal de dos meses para ser clasificados desde el momento en que la sentencia es notificada en los centros penitenciarios. Luego se vuelve a estudiar de forma automática la clasificación de grado cada seis meses como máximo.
La última revisión de Urdangarin fue el pasado julio, permaneciendo en segundo grado. Su progresión al tercer grado, en principio, se podría plantear pasada la mitad de la condena, esto es a partir del segundo trimestre de 2021.