La Guardia Civil jura venganza contra Sánchez: "Nos vende por unos votos"
Las principales asociaciones anuncian movilizaciones en respuesta a la claudicación del presidente en funciones ante el PNV sobre la cesión de las competencias de Tráfico a Navarra.
La decisión de Pedro Sánchez de ceder a las exigencias del PNV y prometer a los nacionalistas vascos que en seis meses transferirá a Navarra las competencias en materia de Tráfico, hasta ahora en manos de la Guardia Civil, ha soliviantado al colectivo.
En la Benemérita el compromiso de Sánchez ha provocado un motín contra él y contra el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska. De hecho los agentes ya anuncian venganza en las calles.
La asociación profesional AUGC, mayoritaria en la Guardia Civil, ha mostrado su "estupor" y anuncia un "duro calendario de movilizaciones si mandan al exilio a los 175 agentes" encargados de este cometido en la Comunidad Foral.
"No son los guardias civiles quienes tienen que servir para este intercambio de intereses, y mucho menos quienes han de pagar las consecuencias de quienes están al frente de las instituciones. Nuestro ámbito de actuación ha de ser en todo el territorio nacional, y no en una u otra parte en función de todo tipo de intereses ajenos a la seguridad pública", denuncia la AUGC en un comunicado.
También la Unión de Guardias Civiles ha hecho público su "profundo malestar" y se pregunta dónde están Grande-Marlaska y el director general de la Guardia Civil, que no hacen nada por defender a los suyos. Asimismo, la UnionGC también abre la puerta a movilizarse "a fin de defender los derechos de los guardias civiles que se verán expulsados de su hogar, teniendo que buscar en otras comunidades un nuevo destino para su puesto de trabajo".
Por último, la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha sido muy contundente al denunciar que el presidente en funciones ha utilizado a dos centenares de agentes como moneda de cambio.
"El señor Sánchez en su carrera para investirse presidente no ha dudado en dejar vendidos a los guardias civiles que en menos de seis meses deberán salir de Navarra, donde la gran mayoría de ellos están asentados y con hijos totalmente integrados en la Comunidad. Pero además, Sánchez y el PSOE también han ninguneado a los navarros saltándose a sus representantes y negociando directamente con el Partido Nacionalista Vasco las condiciones de su estatuto".
"Para AEGC este acuerdo firmado hoy ha condenado a 200 guardias civiles y sus familias a un futuro incierto. Ha empeñado su vida por unos votos, dejándolos en la más absoluta incertidumbre porque a partir de junio serán expulsados de esta Comunidad en la que todos se sienten uno más", se lamenta.
También desde el ámbito político las críticas no se han hecho esperar. "Es un escándalo. Aceptar la histórica exigencia del nacionalismo vasco de que la Guardia Civil salga de Navarra es el colmo de la desvergüenza", ha denunciado el presidente de UPN, Javier Esparza.