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La conversación entre Oramas y el diputado de Teruel Existe que helará al PSOE

La diputada que ha cambiado el sentido de su voto y el que ha denunciado presiones para que lo haga tuvieron una larga charla a solas al final de la primera votación, que Sánchez no superó.

La conversación entre Oramas y el diputado de Teruel Existe que helará al PSOE

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Antes de que Meritxell Batet oficializara la derrota prevista de Pedro Sánchez, Carmen Calvo ya tenía puesto el abrigo en su escaño para salir corriendo.

Y sí, se cumplió el guión. El candidato del PSOE no superó la primera votación, en la que necesitaba mayoría absoluta, y habrá de esperar a la segunda y definitiva: la del martes, en un pleno convocado al mediodía.

Hubo 166 votos a favor de Sánchez, 165 en contra y 18 abstenciones. Faltó un voto de un diputado de En Comú Podem por enfermedad.

A favor votaron el PSOE, Unidas Podemos, PNV, Más País-Equo, Compromís, BNG, Teruel Existe y Nueva Canarias.

En contra lo hicieron el PP, Vox, Ciudadanos, Junts per Catalunya, CUP, UPN, Foro Asturias, PRC y Coalición Canaria.

Y se abstuvieron ERC y Bildu.

El martes, Sánchez confía en superar la votación con 167 síes y 165 noes, un margen que se convirtió en raquítico después de que la diputada de Coalición Canaria Ana Oramas se rebelara contra la abstención que le había ordenado su partido y la cambiara por un "no" rotundo.

Ello ha dejado al diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, en el ojo del huracán, porque si hipotéticamente cambiara su voto favorable por uno en contra el martes, Sánchez no sería presidente.

Es por eso que tuvo tanto morbo la conversación que ambos, Oramas y Guitarte, tuvieron al final del pleno. Mientras el resto de diputados abandonaban el hemiciclo, ellos dos se quedaron en el gallinero (es allí donde están los escaños de ambos, dentro del Grupo Plural) conversando en privado durante varios minutos, tal y como pudo ver ESdiario.

La diputada que ha cambiado de voto y el que ha denunciado públicamente presiones para que lo haga departían amigablemente, largo y tendido, mientras la canaria señalaba los escaños de la bancada del PSOE, ya vacía, y gesticulaba.

Este domingo Oramas no quiso hacer declaraciones públicas. Se limitó colgar un tuit con su discurso, éste:

Su bofetada inesperada ha escocido a los socialistas, pero más aún los llamamientos del PP y Ciudadanos a una deserción en las filas del PSOE. Varios diputados de Sánchez han denunciado, incluso, que han recibido insultos y amenazas por teléfono y en las redes sociales.