La directora de Igualdad fichada por Montero deja su cargo por no ser negra
La directora General de Igualdad será sustituida por ecuatoguineana Rita Bosaho, que sí cumple con el "requisito" de ser negra para estar en el cargo.
Parece que las cuotas y las etiquetas son fundamentales a la hora de elegir a los responsables de los altos cargos de la Administración que ostenta Podemos sin importar las capacidades. O al menos así lo ha puesto de manifiesto la recién nombrada directora General de Igualdad, Alba González Sanz, que ha decidido renunciar a su puesto por no pertenecer a "un colectivo racializado".
Así lo ha anunciado ella misma a través de su cuenta de twitter en la que ha publicado un hilo en el que afirma que "si algo sabemos en el feminismo es que la representación y lo simbólico importan. Hemos reorganizado el equipo de este Ministerio para que haya una presencia visible de mujeres pertenecientes a colectivos racializados. Eso significa que no asumiré la Dirección General", un cargo que quedará en manos de Rita Bosaho, la primera persona negra en conseguir un escaño en el Congreso de los Diputados en 2015.
Además, González ha asegurado que las funciones y el contenido de la Dirección General de Igualdad de Trato y Diversidad Étnico Racial "eran más amplios de lo que se ha interpretado, teniendo que ver con la redistribución económica, la paridad y otros aspectos en los que he venido trabajando, motivo por el que acepté el puesto, con el empeño de trabajar por la igualdad".
Sin embargo, ahora deja el puesto, aunque seguirá trabajando en el ministerio junto a Irene Montero "por los mismos objetivos de redistribución de la riqueza por los que había dicho que sí en primer lugar" y desea "mucho ánimo, suerte y buen tino a la compañera que ocupe el puesto, y me pongo a su disposición si en algo puedo serle de utilidad en la tarea, amplia y diversa, que tiene por delante".