El PNV aprieta a Sánchez con los presos de ETA: Acercamiento "sí o sí"

Con tan sólo dos Consejos de Ministros presididos -une el martes, el de estreno, y otro extraordinario, este viernes- de su Gobierno de coalición, Pedro Sánchez ya está comenzando a sentir el "dolor" que le auguró el Rey Felipe VI durante la promesa del cargo. Y este viene en forma de las facturas que le están pasando ya sus socios, los que permitieron su investidura.

Entre ellos, el PNV, que habla sin miramientos de uno de los precios que le hará pagar a Sánchez por su sí a la investidura. En realidad, será un precio que paguen las víctimas de ETA, pues la intención de los jeltzales no es otra que los sanguinarios miembros de la banda terrorista que cumplen actualmente condena sean trasladados a cárceles de Euskadi o a comunidades autónomas colindantes. Y ello, sin necesidad de que se hayan arrepentido de sus crímenes o estén dando pasos hacia su reinserción.

En total, la medida se aplicaría sobre 210 miembros de la organización terrorista, según el plan diseñado por por el secretario general de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación del Gobierno Vasco, Jonan Fernández.

Este sábado, el portavoz del PNV en el Parlamento, Joseba Egibar, ha defendido que "el acercamiento se debe producir sí o sí". Y ha subrayado que lo planteado supone "una propuesta del Gobierno vasco" en la que no ha habido un cambio de postura sino que es "una propuesta actualizada que ya conocía el primer gobierno de Mariano Rajoy y el de Pedro Sánchez".

Podemos, también a favor

Además del PNV y de, por supuesto, EH Bildu, uno de los partidos que apuestan más seriamente por el acercamiento de los presos vascos es, sorprendentemente, Podemos, que forma parte del Gobierno de Pedro Sánchez. Desde Elkarrekin Podemos, la parlamentaria Edurne García ha señalado que es "de vital importancia que la situación de los presos vinculados al terrorismo sea abordada desde una perspectiva integral de Derechos Humanos".

"Pedimos el acercamiento de los privados de libertad y promover además un trato humanitario", ha indicado para añadir que "hay que acabar con la excepcionalidad y apostar por una revisión de los grados y que el acceso a los beneficios penitenciarios se dé en igualdad de condiciones".