Irene Montero intentará legalizar el aborto a los 16 años sin permiso paterno

Irene Montero no tendrá ni demasiadas competencias ni demasiado presupuesto (unos 180 millones de euros), pero sí una gran capacidad de impacto en la opinión pública y tal vez la legislación: pocos Ministerios habrá tan ideológicos como el de Igualdad, especialmente con alguien al frente como ella, autoconvencida de que libra una cruzada histórica.

Y una de sus propuestas más polémicas puede ser recuperar una parte de la Ley del Aborto enterrada en 2015, con una modificación de la ley de 2010 aprobada por el Gobierno de Zapatero: la posibilidad de abortar, siendo menor de edad, sin ningún tipo de permiso ni tutela de los padres.

El Ejecutivo de Rajoy modificó ese punto de la norma para que los progenitores participaran en una decisión tan traumática y la conocieran; pero la número dos de Podemos no está de acuerdo y prefiere retrotaerse a 2010, en un paquete de medidas que Podemos tiene pensado para los jóvenes de 16 y 17 años.

Desde reconocerles al derecho al voto hasta, ahora, interrumpir el embarazo sin que sus responsables legales, amén de padres, lo sepan ni mucho menos den permiso formal. Montero lo reconoció de manera indirecta en una entrevista en La Sexta, al confirmar que su "referencia" era la ley del aborto completa de 2010. Una manera sutil de apostar por permitir que los menores de edad se sometan a esta intervención sin supervisión paterna.

Curiosamente, en la misma entrevista Montero no se atrevió a defender abiertamente la "abolición"de la prostitución, aunque se mostró partidaria de ello. La contradicción la resolvió explicando que como ministra de Igualdad debe tener "prudencia y mesura" en esta materia que tanto debate suscita en el propio movimiento feminista.

La prostitución

"En el movimiento feminista este es un debate de largo recorrido, pero creo que todas las feministas están de acuerdo en que es fundamental la lucha de forma decidida contra la trata de seres humanos con fines de explotación sexual", recalcó.

Y una última cosa: anunció el endurecimiento de las leyes de corte sexual, aunque no precisó detalles. "Toca trabajarlo en el Consejo de Ministras, pero le voy dar mucha prioridad a las violencias sexuales y libertad sexual". Y ahí se quedó.