Andrea Levy, demoledora con Ábalos: "No aguantaría la prueba del polígrafo"

En un callejón sin salida y con la oposición apretando ante el inesperado filón. El chulesco "a mí no me echa nadie", de José Luis Ábalos , no arredra a los que exigen la dimisión del ministro de Transporte por su reunión secreta, bordeando la legalidad, con la vicepresidenta usurpadora de Venezuela, Delcy Rodríguez.

Sobre todo, porque, en una clarísima relación causa-efecto, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se negó este a recibir, como a cualquier otro homólogo, al presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó.

En opinión de la concejala de Cultura en el Ayuntamiento de Madrid, Andrea Levy, Ábalos, "no aguanta la prueba del polígrafo" dado que ha ofrecido "en 24 horas seis versiones distintas" de su reunión "clandestina" con Rodríguez.

Levy ha asegurado que en el PP están muy preocupados por las informaciones aparecidas, "que señalan que el presidente Ábalos se reunió con la vicepresidenta de (Nicolás) Maduro con nocturnidad y alevosía en un avión", un encuentro del que les inquieta su contenido.

"El gobierno de España no aguanta la prueba del polígrafo porque Ábalos en menos de 24 horas ha dado seis versiones diferentes y ya no sabemos cuál creernos", ha indicado Levy.

"Un escándalo"

Para la 'popular', el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos es el de la "chapuza, el escándalo permanente porque cuando no es Dolores Delgado es la ministra Celaá diciendo que los hijos no son de sus padres, en Navarra pactando con Bildu o se llega a un acuerdo en Estremera con Junqueras para atornillar a Pedro Sánchez en el sillón".

En el PP exigen explicaciones a la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, e incluso al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para conocer "qué se está pactando con el gobierno de Venezuela", además de la "dimisión inmediata" de Ábalos tras sus "explicaciones confusas".

Ábalos confiesa

Para hacerle el episodio más complicado aún al Gobierno, el propio Ábalos "confesó" en directo, en la noche del domingo, que Delcy Rodríguez había pisado suelo español aunque lo negaba aparentemente, al reconocer una entrevista que antes había negado y que después situó en el interior del avión.

El número dos del PSOE lo hizo, de manera confusa y sin reconocer abiertamente nada, en el programa "El Objetivo", en una entrevista dura con Ana Pastor en la que confirmó que el encuentro con la dirigente chavista duró entre "unos 20 y 25 minutos", en los que no le dio tiempo "a tratar nada".

Durante la explicación, el ministro ha negado que Rodríguez tocara suelo español y ha asegurado que el Gobierno de España "no incumplió resoluciones europeas". "Hemos asegurado de que se cumplieran", ha añadido. Pero no es verdad. El País revela este lunes que esa reunión incluyó incluso un cambio de avión de la dirigente venezolana y su presencia en la zona VIP de Barajas.