Sánchez se asusta ante la amenaza de Esquerra y recibe a Rufián de urgencia

Otro incendio en La Moncloa, otra improvisación y la enésima rectificación. El anuncio de Quim Torra de dar por agotada la legislatura ha provocado este jueves un nuevo sainete en la Presidencia del Gobierno.

Primero, con un comunicado anunciando el retraso la mesa de negociación entre el Ejecutivo y la Generalitat hasta después de las elecciones no convocadas aún oficialmente. Después, con otro comunicado enmendándo el anterior. Y, por último, con una llamada de urgencia de Sánchez al hombre fuerte de Oriol Junqueras en Madrid.

Por que en la guerra que ya mantienen Junts y Esquerra, el anuncio matinal del gobierno de Sánchez había provocado un pequeño terremoto en Cataluña con la credibilidad del PSOE en cuestión.

Así que Sánchez y el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, han mantenido durante la tarde un encuentro en el Palacio de La Moncloa, según han informado fuentes conocedoras de la reunión.

Tras ese primer anuncio el Gobierno ha rectificado dejando clara su intención de activar ese foro bilateral sin esperar a la celebración de esos comicios para los que aún no hay fecha y que no se esperan para antes del mes de mayo.

Todo después de que Esquerra hubiera hecho saber, en público y en privado, que consideraba un "incumplimiento flagrante del acuerdo y una irresponsabilidad absoluta" -según fuentes republicanas- la decisión de Sánchez de retrasar la mesa de negociación, uno de los acuerdos esenciales del pacto de investidura entre ambas formaciones.

Así que el Gobierno dice ahora que está dispuesto a constituir la mesa de diálogo con el Govern catalán sobre el conflicto en Cataluña "antes de las elecciones catalanas", según ha subrayado un nuevo comunicado del Palacio de la Moncloa.

El desafío de Torra

También este jueves, los gabinetes de Sánchez y de Torra han mantenido una conversación en la que el equipo del jefe del Ejecutivo catalán ha advertido de que hablaría de autodeterminación en la reunión prevista entre ambos para el 6 de febrero.

Fuentes de Presidencia han explicado que esta conversación ha tenido lugar tras el primer comunicado de Moncloa, en el que advertía de que Sánchez mantenía el encuentro con Torra pese a que éste había anunciado una convocatoria electoral, pero que abordarían "problemas urgentes de la sociedad catalana", como la afectación del temporal Gloria.

El gabinete de Torra "le ha expresado que no se podía estar hablando del lugar de la reunión y al mismo tiempo estar enviando un comunicado en esos términos", han explicado las mismas fuentes.

"Le han dejado claro que el presidente hablaría del derecho de autodeterminación y de la mesa de negociación dijeran lo que dijeran, porque así habían quedado por teléfono los dos presidentes", han concretado.