Las triquiñuelas de Sánchez para que sus "ministros" sin cartera cobren más
Los socialistas aprovechan su mayoría en el Congreso para añadirle un plus salarial a exministros y miembros de la Ejecutiva que se han quedado sin un puesto en el nuevo Gobierno.
El PSOE ha hecho valer su mayoría parlamentaria para colocar a exministros y miembros de su ejecutiva en la presidencia de la mayor parte de las comisiones del Congreso y además repartir las restantes entre sus socios de gobierno, de manera que sólo quedarían una decena para la oposición, lo que supone un notable incremento en la nómina de todos esos altos cargos que se han quedado si un puesto en el Gobierno.
De hecho, el PSOE se ha adjudicado la presidencia de 17 de las 36 comisiones parlamentarias que se van ha constituir en la Cámara Baja, incluyendo la del Pacto de Toledo, que será encabezada por la exministra Magdalena Valerio, o la Comisión de Transportes, que dirigirá José Javier Izquierdo Roncero, secretario de Formación en el PSOE.
Así, según el listado recogido por Europa Press, el PSOE va a presidir un total de 17 comisiones, destacando Exteriores, que recaerá en Pau Mari Klose, ex Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil; Política Territorial, reservada para la exministra María Luisa Carcedo; Constitucional, donde repetirá el exlehendakari Patxi López; Interior, para la ex secretaria de Estado Ana Botella; Derechos Sociales, para el diputado del PSC Joan Ruiz; y la de Igualdad, para la gallega Pilar Cancela.
Y es que, para ocupar esas presidencias de comisión, el PSOE ha escogido a exministros y altos cargos que acaban de dejar el Gobierno y a miembros de la Ejecutiva Federal del partido que no tienen cargo en la Administración y que ya fueron designados para ocupar este tipo de puestos en la fallida legislatura de 2019, añadiendo así un plus a su nómina mensual de 1.547,09 euros en concepto de gastos de representación.
Seis para Unidas Podemos, una para ERC y otra para el PNV
Por contra, el PSOE deja vacante una veintena de presidencias de comisión que recaerán en otros grupos de la Cámara, para Unidas Podemos, su socio de gobierno, se han reservado seis de esas presidencias de comisión y cederá también una a ERC y otra al PNV.
Por tanto, en torno a una decena de presidencias de comisión podrían acabar en manos del PP y de Ciudadanos. El PSOE deja en sus manos ese reparto, pero todo apunta a que está dispuesto a vetar cualquier propuesta que permita a Vox acceder a ese puesto.