Feijóo arrasa en Galicia: los datos que dejan tiritando a Sánchez y a Arrimadas
El PP conserva la mayoría absoluta en Galicia con un Feijóo en estado de gracia que no necesitaría pactos con nadie para derrotar al PSOE y a sus alianzas.
Si en 2016 las mayorías absolutas eran una rara avis, y pese a eso Feijóo logró la suya en Galicia; en 2020 son una especie extinguida. Salvo en el mismo rincón de España y con el mismo político.
Y es que el actual presidente de la Xunta revalidaría holgadamente su rotunda victoria el próximo 5 de abril, según el sondeo de GAD-3 para ABC que se ha conocido este lunes.
La encuesta da a Feijóo los mismos 41 diputados que ahora tiene de los 75 del Parlamento gallego, tres por encima de los necesarios para gobernar sin necesidad de pactos con otras fuerzas que, en su caso, serían además imposibles: el resto de la representación parlamentaria es para partidos de izquierda, con el PSOE, el BNG y En Marea totalmente enfrentados al PP.
El barón popular emite así dos mensajes muy claros: uno a Pedro Sánchez, casi obsesionado con desalojar al PP de Galicia y dispuesto a asumir protagonismo en la campaña electoral según reveló Antonio Martín Beaumont.
El cuadro de la encuesta de ABC
Y otro a Inés Arrimadas, empeñada en una coalición con los populares que Feijóo rechaza desde la certeza de que la marca ganadora es la suya. VOX, el otro invitado del centroderecha, no se presentó en 2016 y es probable que no lo haga ahora, aunque falta un anuncio oficial en el sentido que sea.
Hundimiento de Podemos
Estos datos le dan la razón, y tranquilizan en Génova y a Pablo Casado. Pese a que la relación política entre ambos dirigentes ha pasado por momentos de frialdad, ambos se necesitan y lo saben: los populares necesitan un éxito que solo Feijóo puede darles y, por su parte, Feijóo necesita de su sintonía con Génova para su futura carrera política.
Feijóo es una rara avis que lograr resultados de otra época y pone en alerta a la propia Moncloa
La encuesta de GAD 3 refleja otro fenómeno inquietante, esta vez para Podemos, cuya marca regional sufre un notable desplome en beneficio del PSOE y del nacionalista BNG: los socialistas suben siete diputados, de 14 a 21; el Bloque pasa de 6 a 11 y la Marea, en cambio, se hunde de 14 a 2 escaños.